En estos momentos, Mitsubishi está en la cuerda floja a nivel corporativo. Aunque el 34% de sus acciones pertenecen a la Alianza Renault-Nissan, desde Japón llegan rumores de venta de esta participación. Esta venta dejaría a Mitsubishi en un brete, además de impedirle el acceso a las tecnologías de la Alianza que tanto necesita. Con una gama veterana, y en productos como el Mitsubishi ASX, directamente desfasada, Mitsubishi necesita rentabilidad como agua de mayo. Y es aquí donde entra en escena la que quizá es su última oportunidad: el Mitsubishi Eclipse Cross PHEV.
Esta versión enchufable de su SUV compacto es un producto que debe funcionar a nivel comercial. Debe funcionar para que la marca pueda financiar otros desarrollos, además de salvar sus resultados en Europa. Recordemos, hace unos meses, incluso se llegó a valorar su salida del mercado europeo. Sea como fuere, el Mitsubishi Eclipse Cross PHEV es el producto más importante de la marca japonesa. A nivel visual, presenta una diferenciación sutil con sus hermanos de combustión interna, centrada en su kit de carrocería, ligeramente más aerodinámico.
Mitsubishi Eclipse Cross
Las molduras inferiores del paragolpes frontal tienen una combinación de colores en contraste, mientras que en su perfil lateral encontramos unas llantas aerodinámicas de 18 pulgadas y unas taloneras de dimensiones generosas. En el paragolpes trasero encontramos un aspecto también algo más aerodinámico, con sus molduras pintadas en el color de la carrocería. En su interior, la instrumentación reemplaza el cuentavueltas por un potenciómetro, y la palanca de cambios se reemplaza por una palanca de nuevo diseño. Los cambios justos y necesarios, en definitiva.
A falta de conocer sus prestaciones o si pierde maletero a causa de su pack de baterías, sabemos que el Mitsubishi Eclipse Cross PHEV cuenta con un grupo motopropulsor idéntico al del Mitsubishi Outlander PHEV, además de tracción total S-AWC. Esto se traduce en un motor 2.4 MiVEC de ciclo Atkinson y 135 CV, asociado a dos motores eléctricos: un motor de 82 CV en el eje delantero y un motor de 95 CV en el eje trasero. Eje trasero, por cierto, desconectado del resto del tren de rodaje: es decir, el eje trasero sólo está accionado por este motor eléctrico.
La potencia combinada del sistema es de 224 CV, y es capaz de circular en modo 100% eléctrico durante 45 km (ciclo combinado WLTP) bebiendo energía de una batería de iones de litio de 13,8 kWh de capacidad. A falta de confirmación oficial, debería ser compatible con recarga rápida en corriente continua a una potencia de hasta 22 kW – una cifra superior a la de muchos híbridos enchufables. A esa potencia, debería recuperar el 80% de la carga en 25 minutos. Si lo cargamos en un wallbox a 3,7 kW, la recarga completa de su batería debería demorar 3 horas y media.
Una novedad importante es que este Eclipse Cross puede actuar como generador eléctrico de hasta 1.500 watios de potencia, con una toma de corriente convencional. Algo muy práctico en escapadas al aire libre, de cara a usos profesionales e incluso en caso de emergencia. Al mismo tiempo, puede comunicarse con una casa inteligente mediante el protocolo V2H. Es capaz de dar energía a un hogar durante 10 días, suponiendo que está cargado y el depósito de combustible está lleno. A falta de conocer más datos, sabemos que se comercializará en España en marzo de 2021.
El Mitsubishi Outlander PHEV es el híbrido enchufable más vendido del mundo. ¿Estará este Eclipse Cross PHEV a su altura? Con varias opciones enchufables en el segmento de los SUV compactos generalistas, la lucha no ha hecho más que comenzar.