El Morgan 3-Wheeler es uno de los coches más especiales actualmente a la venta. Bueno, si es que lo podemos llamar «coche». En verdad, tiene tres ruedas y un motor V-twin de moto, montado por delante del eje delantero. Es un coche anacrónico, basado en un diseño de la Morgan Motor Company de los años 30 del pasado siglo, mínimamente actualizado. Ha sido un éxito de ventas para Morgan desde su lanzamiento en el año 2012, pero tras ocho años a la venta, la marca se despide de su más pequeño. Y nos presentan una preciosa (y nostálgica) edición limitada de despedida.
Quizá te preguntas por qué el Morgan 3-Wheeler va a dejar de fabricarse. El motivo es que la homologación de tipo del motor V-twin fabricado por S&S – de nada menos que dos litros de cubicaje y 82 CV – caduca en 2021. Para despedirse del 3-Wheeler, han creado esta edición limitada a 33 unidades, llamada P101. P101 significa Project 101, que fue el nombre interno con el que Morgan dio vida al 3-Wheeler hace una década. La producción ya está adjudicada a concesionarios de la marca, que ven en este triciclo un canto de cisne muy especial para este icono.
Las diferencias del P101 con respecto a otros 3-Wheeler son estéticas y de equipamiento, pero marcan la diferencia. El detalle más llamativo son sus nuevas llantas aerodinámicas, un disco ciego en el que la tuerca dorada pone el toque clásico. En su frontal se equipan dos enormes antinieblas Hella de 9 pulgadas, que quedan tan bien en un Lancia Delta Integrale, como en este Morgan. Una cubierta translúcida de tono dorado cubre el asiento del pasajero mientras no está en uso. La asimetría continúa en el escape: el izquierdo es blanco, el derecho es negro.
En su lateral se puede leer claramente «P/101», y en sus escapes también contamos con flexibles de color dorado. Disponible en color negro o plateado, la carrocería se puede decorar con cuatro packs diferentes de vinilos, con nombres tan fantásticos como «The Dazzleship» o «The Belly Tank». La potencia del motor S&S sigue siendo de 82 CV, transmitidos a la rueda trasera a través del cambio manual de un Mazda MX-5. Hace el 0 a 100 km/h en 6,0 segundos gracias a su ligereza, y se me ocurren pocos coches más plenos en sensaciones. Es un juguete que echaremos de menos.
Su precio arrancará en 45.000 libras esterlinas. Aunque sepa a despedida, Morgan promete que el 3-Wheeler volverá, tal y como rezan las películas de James Bond. Estaremos esperando.