¿Comprarse, o no, un coche diésel con la que está cayendo? Ese es claramente el dilema al que se enfrentan muchos españoles a día de hoy tras demasiado tiempo escuchando declaraciones, desmentidos, globos sonda y demás polémicas. Los coches alimentados por gasóleo no atreviesan su mejor momento, sin embargo España ha vuelto a comprar más coches diésel frenando la acusada caída de este tipo de vehículos. ¿Llegó el momento de volver a confiar en los coches diésel?
Agosto ha conseguido registrar un dato bastante significativo en tanto a la caída de ventas de coches que ya arrancó en 2018. Aunque este dato está ciertamente desvirtuado por el efecto WLTP, lo que sí que está claro es que el mercado automovilístico en España está cayendo y en lo que llevamos de año ya se acumula una caída del 9,2%.
Pero existe un dato sumamente curioso que se ha reflejado en los últimos 3 meses de 2019 (Junio, Julio y Agosto), las ventas de coches diésel no solo han frenado su desplome, sino que han vuelto a crecer en el entorno del 1,5%. De este modo, y aunque el desplome de los coches diésel frente a los coches gasolina sigue siendo muy acusado, la cuota de coches con motor a gasoil vendidos en Agosto ha sido del 27,1%.
Esta subida continuada desde el mes de Junio donde el diésel copó el 25,9% de las matriculaciones pone de manifiesto que la supremacia de los motores gasolina es incuestionable en la actualidad (59,2% en Agosto), pero que la demonización del gasóleo comienza a diluirse. La situación de incertidumbre política junto al anuncio de medidas de carácter restrictivo ha supuesto para los vehículos diésel un duro revés, sin embargo este repunte indica el aparente fondo de esta situación.
¿Es el momento de comprarse un coche diésel?
La respuesta a esta pregunta es que nunca ha sido mal momento para comprarse un coche diésel. Los reiterados anuncios de prohibiciones, restricciones y demás solo han servido para provocar miedos y caos entre los compradores, una situación de incertidumbre que está llevando al comprador a buscar fórmulas de compra más seguras. El auge del coche usado y las fórmulas de renting son ejemplos muy claros de esta huída.
Tanto antes de la demonización del diésel, como durante y después, los coches diésel siguen ofreciendo claras ventajas para todos aquellos que buscan el menor coste por kilómetro. Puestos a buscar un problema real en nuestro parque automovilístico, ese es claramente la elevada edad media de los coches españoles. El menor consumo de carburante en los diésel sigue estando ahí, y aunque a futuro se espera la equiparación de precios entre gasóleo y gasolina, el coste de desplazarse en diésel seguirá siendo inferior frente a un motor gasolina equivalente. A todo ello debemos añadir que los motores diésel más modernos cuentan con el mismo etiquetado que sus alternativas gasolina, teniendo como única desventaja en este punto la falta de competencia con la etiqueta ECO que pueden lucir híbridos y vehículos movidos a GLP o GNC, además de los polémicos semihíbridos.
El futuro sigue mostrándose incierto, especialmente ante la falta de un Gobierno capaz de abordar en tiempo y alcance un plan de movilidad en todo el territorio español. Esa falta de seguridad a medio-largo plazo seguirá repercutiendo en las ventas de coches hoy, sin embargo la compra de un coche diésel en la actualidad sigue siendo una buena opción siempre y cuando sus ventajas nos resulten superiores a las de sus alternativas.
Fuente: Anfac | Faconauto