Corría el año 2004, y una Rolls-Royce recién rescatada por el grupo BMW presentaba en el Salón de Ginebra un prototipo muy especial. Se llamaba Rolls-Royce 100EX, y era un escultural coupé de superlujo de 5,67 metros de largo. Un vehículo muy apropiado para conmemorar el centenario de la reunión de Charles Rolls y Sir Henry Royce, que daría pie a la icónica marca británica. Lo que este prototipo escondía, no obstante, era un motor V16 de 9,0 litros que a punto estuvo de ser producido en serie y cuya historia es absolutamente fascinante.
Un V16 para dominarlos a todos
Este motor V16 buscaba ser el motor más especial jamás creado por la marca, un puñetazo sobre la mesa comparable al motor W16 de 1.001 CV que el Grupo Volkswagen había instalado en las entrañas del Bugatti Veyron. Según diversas fuentes, este motor estaba inicialmente diseñado para el Rolls-Royce Phantom, que fue lanzado al mercado con un V12 atmosférico de 6,75 litros y 460 CV de potencia. Un motor sedoso y absurdamente refinado, con una potencia más que «suficiente» para mover con soltura las casi 2,5 toneladas de berlina británica.






Sin embargo, para algunos ingenieros, este coche merecía un motor más especial. Es ahí donde entra en juego el motor V16 de 9,0 litros con el que Rolls-Royce presentó en 2004 el 100EX, el prototipo que anticiparía el lanzamiento de los Phantom Coupé y Drophead Coupé – aun más hedonistas. Apenas hay información sobre este motor en internet, y tanto BMW como Rolls-Royce nunca comunicaron datos técnicos o mucha información al respecto. Lo que sí es seguro es que este motor nunca llegó a ser producido en serie, desgraciadamente.
El V16 estaría basado en el V12 del Phantom, al que se añadieron cuatro cilindros adicionales, que llevaron su cilindrada hasta los nueve litros. Varias fuentes estiman su potencia final entre los 600 y 700 CV, con un par motor en el entorno de los 800 Nm. Este propulsor cabía perfectamente en el vano motor del Phantom, lo que sugiere que pudo haber sido concebido desde el propio inicio del desarrollo del Phantom. La línea oficial de la marca era que «no cumplía las cualidades necesarias de silencio, refinamiento y tacto de alfombra voladora requeridas».
Las malas lenguas, sin embargo, afirman que fue BMW la que negó a Rolls-Royce el lanzamiento de este motor, alegando que podría provocar una crisis reputacional a BMW, que en aquella época trataba de promover una imagen respetuosa a nivel medioambiental. La historia no termina aquí. Se sabe que Rolls-Royce construyó tres motores V16 para sus pruebas internas, y el dato realmente curioso es que uno de ellos acabó usándose en una película protagonizada por Rowan Atkinson, montado en un Rolls-Royce Phantom Coupé.
Atkinson, petrolhead confeso y propietario de coches como el McLaren F1, sabía que Rolls-Royce tenía varios V16 en sus almacenes. Él mismo era propietario de un Phantom, al que estaba acercando a la barrera de los 150.000 km en pocos años. Haciendo uso de su influencia y sus contactos, convenció a los de Gaydon de que montasen uno de esos V16 en el Phantom Coupé que sería el co-protagonista del actor en «Johnny English Reborn». Sí, una película de espías que parodia a las películas de espías de James Bond.
En varias escenas de la película se puede ver el coche, y además, puede contemplarse el motor mientras es mostrado a Johnny English por Pat Quartermain (el equivalente de Q en las películas del agente 007). El departamento Bespoke de Rolls-Royce se implicó personalmente en la producción del filme, asegurándose que el V16 funcionaba adecuadamente. Además del coche protagonista, suministraron otro Phantom Coupé «convencional» para ser usado por especialistas, dotado con una mecánica V12 de producción.
El coupé de la película sigue estando en manos de Rolls-Royce. Curiosamente, no era la primera vez que una marca del Grupo BMW experimentaba con motores de 16 cilindros. A finales de los años ochenta experimentaron con un BMW Serie 7 con motor V16 de 6,7 litros. El 767iL «Goldfish», apodado así por sus radiadores traseros, no llegó a producción tras alegaciones de un coste y consumos demasiado altos. Te hemos contado su historia en múltiples ocasiones, y te animamos a repasarla a través de estos enlaces.
Fotos del Rolls-Royce 100EX






Fuente: Autotrader