Hasta hace poco prácticamente solo existía una fórmula para hacer que un coche, y su motor, fueran más potentes. Más cilindros, más cilindrada, sistemas de sobrealimentación sujetos a estrés, altas presiones, elevadas frecuencias de giro, desgaste y fricciones. Motores más grandes, pesados, complejos y, por ende, un problema para alcanzar un nivel de fiabilidad.
El motor que deja obsoleta a la gasolina
- ZF Friedrichshafen, un gigante de la ingeniería, muy conocido por sus transmisiones automáticas – aunque eso es solo una pequeña parte de su negocio – quiere que su nuevo motor esté en la próxima generación de automóviles
- En un conjunto del tamaño de dos cajas de zapatos apiladas se integran motor, electrónica, inversor y la reductora que hace las veces de una caja de cambios en un motor de gasolina
- Entrega 374 CV de potencia máxima en pico y 280 CV de potencia continua
El fin de la gasolina… y la combustión interna
Embragues, transmisiones, soluciones de parte ciclo. El negocio de ZF Friedrichshafen – en la parte que concierne a la automoción – ha estado naturalmente ligado a los motores de combustión interna. Muy conocidas, y extendidas en la industria, sus transmisiones automáticas han estado presentes en un amplio abanico de coches. Su transmisión 8HP puede encontrarse en marcas tan variadas como Alfa Romeo y BMW, Jeep y Land Rover, hasta Bentley, Maserati y Rolls-Royce.
Adiós a los cambios de ZF. Pero, por desgracia, más temprano que tarde dejaremos de ver las transmisiones automáticas de ZF en los concesionarios. Y la razón no será otra que el hecho de que también dejaremos de ver, en general, coches gasolina, diésel e híbridos, de combustión interna en general, en los concesionarios.
Un conjunto motor del tamaño de dos cajas de zapatos
Dos cajas de zapatos apiladas. ZF ha conseguido integrar en un conjunto, que no ocupa más que dos cajas de zapatos apiladas, el motor, la electrónica, el inversor, y la reductora que haría las veces de una caja de cambios en un motor de gasolina. Su masa es de solo 74 kilogramos siendo, según ZF, hasta 40 kilogramos más ligera que en los motores actuales.
374 CV de potencia máxima en pico. 280 CV de potencia continua y un par continuo de 2.850 Nm y máximo de 5.200 Nm. Trabaja a 800 voltios, con un inversor de carburo de silicio.
Engranajes planetarios solidarios al eje para el sistema de reducción. Configuración coaxial para la reductora y el motor, con un bobinado trenzado.
La obsolescencia del motor de combustión interna
De aliado de la combustión interna a primer proveedor de motores eléctricos. Al menos ese es el objetivo de ZF, que se ha propuesto convertirse en el primer proveedor de la industria, con un extenso catálogo de mecánicas, destinadas tanto a turismos – como el Mercedes EQA – como a vehículos de transporte pesados.
2026 es la fecha en la que se espera llegue este motor. De momento, ZF ya ha estado probándolo en un Porsche Taycan. Pero este motor no solo estaría destinado a deportivos y modelos de gama alta, sino también a turismos más modestos.