Desde la muerte de Saab a finales de 2011, hemos sufrido un constante bombardeo de información acerca de los derechos de la marca, sus futuros dueño y los planes de rescate. Desgraciadamente, todo se quedó en agua de borrajas, y podemos afirmar que Saab está de forma efectiva, muerta. Actualmente, NEVS, una empresa de capital chino, es la propietaria de algunos de los antiguos activos de Saab, así como los diseños de los antiguos Saab 9-3 y 9-3X. Es sobre estos dos coches sobre los que ha presentado dos coches eléctricos, que presentará próximamente en el CES de Shanghai. Auténticos zombies eléctricos, resucitados del cadáver de Saab.
Saab comenzó a llamar 9-3 a su 900 a finales de los años 90. Quién nos diría que dos décadas después acabaría siendo el nombre de unos coches eléctricos con restos de ADN sueco, fabricados sobre una antigua plataforma de General Motors y repletos de tecnología de origen chino. NEVS ha presentado dos vehículos, el 9-3 y el 9-3X, una berlina de tres volúmenes y un familiar de aspecto campero, basados en los antiguos Saab 9-3 y Saab 9-3X. A nivel de diseño, sólo cambia el frontal, con una nueva calandra con detalles azulados, unas nuevas ópticas y un paragolpes más aerodinámico.
No obstante, no pueden ocultar sus orígenes, ya que el resto del coche es prácticamente calcado al de los antiguos Saab. Incluso el diseño de llantas multirradio es prácticamente idéntico. NEVS no ha suministrado información acerca de sus motores eléctricos o la capacidad de sus baterías, pero todas las fuentes apuntan a un motor eléctrico de 136 CV que propulsaría las ruedas delanteras, y una batería – de al menos 30 kWh de capacidad – con «zumo de electrones» suficiente para unos 300 km de autonomía. Sobre el papel, hablaríamos de prestaciones y autonomía ligeramente superiores a las de un
Aunque NEVS no haya estado últimamente en el candelero, la empresa pronto comenzará a fabricar estos coches en Tianjin (China) y los comenzará a vender en 2018. La empresa tendría acumulada una enorme cartera de pedidos, de 150.000 unidades. Una enorme producción que iría destinada íntegramente a Panda New Energy, la empresa de léasing de vehículos eléctricos más grande de China. En unas semanas sabremos más datos acerca de estos dos eléctricos.
Fuente: Motor Authority