La historia de Saab es ya por todos conocida. Una triste historia que ha dado al traste con la historia y el futuro de una de las marcas europeas con más carácter e inventiva de todos los tiempos. Pese a los intentos de ser rescatada por Koenigsegg, Spyker o NEVS, la realidad es que nunca se pudieron sobreponer a la bancarrota de General Motors, en la que fue eliminada de su portfolio corporativo como un vulgar «activo tóxico». Con todo, es posible que aún puedes estrenar un Saab 9-3. Concretamente el último jamás fabricado en Trollhättan, un Saab 9-3 del año 2013 con solamente cinco kilómetros.
El coche en cuestión es un Saab 9-3 con carrocería sedán, construido a principios del año 2014. Por aquél entonces, hace ya casi seis años, NEVS – una empresa de origen chino, propietaria de los activos de Saab – aun creía posible la vuelta a Saab a la rentabilidad y a la producción en serie de coches. De hecho, conservaban los derechos de uso de la marca comercial «Saab» y durante unos meses construyó y vendió algunos Saab 9-3. Eran tiempos tumultuosos y se estima que solo se construyeron 420 unidades, gracias a la contribución, prácticamente desinteresada, de cientos de los proveedores originales de Saab.
La unidad que será subastada por Saab es, según NEVS, el último Saab 9-3 de producción jamás fabricado. Un coche cuyo destino era muy oscuro: iba a ser el protagonista de un crash-test que nunca llegó a ocurrir. A falta de conocer más detalles al respecto, es posible que fuera una prueba de choque interna o una nueva homologación europea. Sea como fuere, a principios de 2014 NEVS y Saab volvieron a entrar en suspensión de pagos y todas sus actividades económicas cesaron. Tras recibir una nueva inyección de capital, NEVS perdió el derecho a usar la marca «Saab» y decidió centrarse en los coches eléctricos.
De hecho, parte de los activos de Saab acabaron en instalaciones chinas de NEVS, donde recientemente se han presentado coches eléctricos basados en los últimos Saab 9-3 – irónicamente, construidos usando como base una antigua plataforma de origen General Motors. NEVS aún conserva las instalaciones de Saab en Trolhättan como centro técnico y fábrica, y allí será donde se subasta próximamente este trocito de historia. El último Saab 9-3 fabricado está siendo mostrado en el Saab Car Museum Festival, que está teniendo lugar en estos momentos en la histórica ciudad de la Suecia occidental.
El coche en cuestión es de color plateado y está equipado con un motor 2.0 turbo de 220 CV, asociado a una caja de cambios de seis relaciones y convertidor de par – el coche de las imágenes es manual – que mueve exclusivamente las ruedas delanteras del coche. El coche es idéntico al de las imágenes, pero en color plateado. Sólo tiene cinco kilómetros en su odómetro. Un detalle un poco friki: los 9-3 de NEVS se distinguen de otros por el fondo negro de sus emblemas, y la ausencia del «griffin» en ellos.
Fuente: Autocar
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