El Ferrari 458 Italia pasará a la historia como una de las mejores berlinettas que Ferrari ha hecho jamás. Rapidísima, ágil, eficaz, avanzada tecnológicamente al mismo tiempo que es capaz de transmitir sensaciones al conductor… El 458 Speciale hizo lo que parecía imposible: mejorar el Italia. El más difícil todavía se convirtió en realidad en forma del V8 atmosférico más potente que jamás ha hecho Ferrari. Y más tarde le añadieron el toque que faltaba: exclusividad, con el 458 Speciale Aperta.
De ese último sólo se fabricaron 499 unidades, de las cuales la primera se vendió por 900.000 dólares en una gala benéfica. Tenía lógica el precio excepcionalmente elevado debido al simbolismo de ser la primera unidad de todas y a que lo recaudado iba destinado a obras sociales y a la caridad.
El 458 Speciale Aperta monta un motor 4.5 V8 atmosférico de 605 CV a 9000 rpm y 540 Nm de par máximo con el que era capaz de hacer el 0-100 Km/h en 3 segudos y de 0 a 200 Km/h en sólo 9,5. Unas cifras que en el momento de su lanzamiento lo convirtieron en el V8 más potente de la historia de la marca y también en el descapotable más potente de Ferrari (un título que ahora encarna el LaFerrari Aperta).
Tenía un precio de salida en España de 300 000 euros (no llegaba por un poco, en realidad). Un precio que en la práctica, y tras personalizarlo al gusto del cliente, aumentaba varias decenas de miles de euros en la mayoría de casos. Teniendo en cuenta que, a diferencia del Speciale de techo cerrado, el descapotable era una versión con producción muy limitada y que además ha sido muy probablemente el último V8 atmosférico de Ferrari, el 458 Aperta inmediatamente se convirtió en un coche de colección, un clásico moderno.
Actualmente el Aperta cotiza aproximadamente al doble que el 458 Speciale. Mientras que el coupé se puede encontrar en el mercado de segunda mano por menos de 300 000 euros con facilidad, llegando a 340 mil los ejemplares más caros, es prácticamente imposible encontrar un 458 Aperta por debajo del medio millón de euros. De hecho, los precios más habituales de los Aperta de segunda mano se sitúan entre 650 000 y 700 000 euros, alcanzando quizá los tres cuartos de millón los ejemplares con más opcionales extra y menos kilometraje.
Lo que no es nada habitual es el precio que pide un concesionario alemán por una unidad (la roja de las imágenes), eso sí, prácticamente nueva: sólo 289 Km en su odómetro. ¿Tarifa? Unos escalofriantes 899 000 euros. Un precio que ni siquiera se justifica con la gran cantidad de equipamiento extra que lleva este ejemplar. ¿Quién dijo burbuja?
Entre el equipamiento extra encontramos:
- Asientos Racing de carbono (talla L)
- Escudos Ferrari laterales
- Línea decorativa en blanco y azul
- Llantas de 20″ en acabado diamante
- Faldones y flaps laterales, spoiler frontal, aletas de ventilación del parachoques delantero, pilar B, apéndices aerodinámicos traseros y difusor trasero en fibra de carbono
- Asientos en piel y alcántara con costuras en diferente color y cavallinos bordados en el reposacabezas
- Sistema de elevación del frontal del coche
- Interior en piel y fibra de carbono, volante en dos tonos, cuentarrevoluciones de color amarillo y cinturones de seguridad en rojo
- Sensores de aparcamiento delantero y trasero con cámara de marcha atrás
- Techo de piel y alfombrillas con logo Ferrari
Y esos no son todos, aún quedan más… Una lista por la que Ferrari engrosa una cuantiosa suma de dinero, hasta el punto de poder llegar a los seis dígitos solamente en opciones. Una lista, sin embargo, que ni siquiera justifica su elevadísimo precio; otras unidades similares a la venta no tienen un precio tan abultado. La pregunta es: ¿lo venderán a este precio, o tendrán que rebajarlo? De conseguirlo con la primera opción, no será más que otra prueba corroborativa de la burbuja y la especulación que existe en el mundo de los clásicos y los deportivos.