Con las ITV funcionando ya a pleno rendimiento desde hace aproximadamente un año tras la interrupción provocada por la incidencia de la pandemia de coronavirus, parece que poco a poco vamos retomando la normalidad. Es el momento, por tanto, de incorporar novedades y mejoras en los procedimientos de inspección, que próximamente se verán modificados con la llegada de una nueva prueba que afectará a todos los turismos que tengan que someterse a la inspección. ¿De qué estamos hablando?
A día de hoy existe un gran consenso cuando se trata el tema de la contaminación: no existe un solo tipo de contaminación como tal, sino que es posible hablar de emisiones contaminantes, también de contaminación lumínica y, evidentemente, también de contaminación acústica. Es precisamente en esta última línea en la que va encaminada la nueva prueba que llegará a las ITV de todo el país dentro de un tiempo.
Sí: las ITV efectuarán pruebas de ruido a los turismos que acudan a sus instalaciones para las inspecciones rutinarias, pruebas de ruido que tendrán como objetivo determinar si un vehículo en cuestión está cumpliendo con los parámetros sonoros bajo los que fue homologado, permitiendo también detectar posibles alteraciones en el sistema de escape del coche.
Las ITV harán pruebas de ruido, pero…¿cuándo?
Estas pruebas no son nuevas, ni siquiera en nuestro propio país: en la Comunidad Valenciana se llevan a cabo este tipo de controles, aunque no tienen un carácter «eliminatorio», de forma que se reduce a un simple dato informativo que hace referencia al nivel sonoro de la unidad en cuestión. Tras la aplicación de las nuevas directrices que llegan desde la Unión Europea, este dato dejará de ser informativo para ser un elemento más a controlar.
Estas pruebas llegarán a las ITV de todo el país (y también a otros países del entorno europeo) a partir de 2023, cuando pasarán a ser obligatorias. A partir de entonces, todos los turismos que acudan a la ITV tendrán que someterse también a la prueba de ruido, una prueba que hasta ahora se reservaba a las motocicletas. Para determinar si el vehículo está cumpliendo con la legalidad, se consultarán diferentes bases de datos con el fin de comparar los valores teóricos de homologación con los valores que el vehículo está arrojando en la realidad.
La llegada de estas pruebas no está exenta de cuestiones, ya que se desconoce cómo se llevarán a cabo estas mediciones, más si tenemos en cuenta que el nivel sonoro ambiente de una estación de ITV no es, por lo general, bajo. ¿Será necesario la instalación de nuevos sistemas de medición? ¿Repercutirá esa instalación en el precio que el usuario paga por someterse a la ITV?
El 1 de junio entraron en vigor nuevos cambios en la ITV
No es la única novedad, ya que hace apenas unas semanas, el 1 de junio de 2021, entraron en vigor más cambios en los procedimientos técnicos de las ITV, que modificaban algunos criterios y pruebas para vehículos. De esta manera, el hecho de equipar un sistema ABS y que éste no funcione, independientemente de la edad del vehículo, supone ahora una falta grave en lugar de un defecto leve como hasta entonces.
Algo similar ocurre con los espejos retrovisores exteriores, que deben estar correctamente anclados a la carrocería del coche. En caso de que no sea así, nos enfrentaremos a un defecto de tipo grave que nos impedirá superar con éxito la inspección.
