Comprar un coche nuevo va a ser todavía más caro y lo será a partir del mes de septiembre. La vuelta a la rutina será más complicada para aquellos que vayan a hacer cambios en su garaje personal porque será entonces cuando entre en vigor un nuevo impuesto, que afecta a algunos de sus componentes.
Europa vive una crisis energética derivada de la Guerra de Ucrania y el Gobierno ha tomado medidas para minimizar el impacto que esto tiene en el bolsillo del consumidor. Una de ellas ha sido, como apunta El Comercio, la modificación del Impuesto sobre los Gases Fluorados de Efecto Invernadero, que estaba regulado en el Artículo 5 de la Ley 16/2013 de 29 de octubre.
La Ley 14/2022
Este cambio se ha producido con la aprobación, el pasado 8 de julio, de la Ley 14/2022 que establece determinadas medidas en materia de fiscalidad medioambiental y adopta otras medidas tributarias y financieras para garantizar un efectivo control de dichos gases.
En otras palabras: antes este impuesto sólo afectaba a los que vendían gases fluorados directamente al consumidor final, pero ahora, según la Asociación de Empresas del Frío y sus Tecnologías (AEFYT) se aplica a la fabricación e importación de nuevos equipos y sistemas de refrigeración, aire acondicionado, bombas de calor y electrodomésticos, que han dejado de estar exentos.
Coches más caros por dos razones
La ley entrará en vigor el 1 de septiembre de 2022 y una de las consecuencias será el encarecimiento de todos estos elementos: se calcula que el precio subirá entre un 5 y un 10%. Los sectores afectados son la industria alimentaria, la hostelería, los supermercados, industria alimentaria y las grandes superficies que venden aparatos de calor y frío. A esta lista se suma el mundo del motor.
El reformado Impuesto sobre los Gases Fluorados de Efecto Invernadero no sólo afectará al coste del aire acondicionado, también al de la bomba de calor que es un elemento clave para los coches eléctricos. Bien es cierto que, teniendo en cuenta que el incremento estará entre un 5 y un 10%, la repercusión no será muy elevada aunque sí afectará al precio de los coches nuevos: en abril de 2022, según la Agencia Tributaria, la cifra media de estos vehículos era de 22.755 euros.
¿Habrá multas?
La nueva Ley 14/2022 establece la obligatoriedad de inscribirse en el Registro territorial del Impuesto sobre los Gases Fluorados de Efecto Invernadero: si no cumplen esta premisa, las sanciones puede ser de hasta 1.500 euros. Y si se dan “diferencias en menos de los gases objeto del impuesto en los fabricantes”, la sanción será la cantidad correspondiente a la cuota que le hubiese incumbido en un principio.