Que el futuro del automóvil será por 100% eléctrico cada vez está menos claro, por lo menos en el corto y medio plazo, por ello cada vez son más los fabricantes que se están apresurando en desarrollar alternativas que les permita reducir emisiones, pero sin dejar de lado los motores térmicos. KIA ha sido la última marca en sumarse a esta corriente anunciando el desarrollo de un nuevo motor turbo gasolina con 2,5 litros de cilindrada.
El motor término tiene aún mucho que decir en el futuro de KIA
El fabricante coreano KIA acaba de presentar algunas de las novedades que llegarán a su gama de modelos en los próximos años. Sí, los eléctricos serán cada vez más protagonistas, pero junto a ellos veremos un portfolio repleto de alternativas en forma de híbridos, híbridos enchufables y eléctricos de autonomía extendida.

KIA Kia Sorento
Es más, incluso también veremos modelos que seguirán apostando fuertemente por los motores térmicos con poca o ninguna electrificación, modelos dirigidos especialmente a mercados como el americano o el australiano. Y es por ello por lo que en KIA han decidido distanciarse de la senda en la que están sumidos el grueso de fabricantes de coches, anunciando el desarrollo de un nuevo motor gasolina.
Así es, KIA ya está trabajando en un nuevo propulsor 2.5 Turbo gasolina, una mecánica de cuatro cilindros en línea con turboalimentación e inyección directa que promete mejorar un 5% en eficiencia con respecto al bloque actual, consiguiendo además una mejora en rendimiento que permitirá elevar la potencia por encima de los 300 CV y el par motor máximo más allá de los 420 Nm.
Esta nueva generación del motor 2.5 será diseñada con el objetivo de ser compatible con múltiples aplicaciones y con un carácter global, siendo capaz de impulsar coches sin rastro de electrificación, pero también una nueva evolución de los sistemas híbridos e híbridos enchufables usados por coches como el KIA Sorento. Esta nueva generación de híbridos se beneficiarán a su vez de una evolución en el cojunto de propulsión eléctrica y transmisión, consiguiendo mejorar un 4% en eficiencia y permitiendo alternar el funcionamiento en serie y en paralelo para adaptarse mejor a cada estilo de conducción.






De hecho KIA no se detendrá aquí e ira más allá con esta mecánica de 2,5 litros, pues todo apunta a que una de sus aplicaciones también será la de servir como generador en coches eléctricos de autonomía extendida, una tecnología que la marca pretende impulsar dentro de su gama de aquí a 2030 como alternativa a los eléctricos a baterías en berlinas y SUV de gran tamaño.