El Grupo Hyundai, cuyas marcas de automóviles son KIA y la propia Hyundai, ha hecho público el desarrollo de una tecnología que podría cambiar para siempre la conducción invernal. En esencia, se trata de un neumático que incorpora una suerte de cadenas para nieve, las cuales se activan mediante un sistema electromecánico y retráctil. Esto supone varias ventajas, empezando por no requerir una instalación manual una vez se afrontan vías susceptibles de ofrecer poco agarre. La compañía surcoreana lo presenta como algo muy factible en el corto plazo y como una alternativa a los neumáticos M+S.
Unas ruedas revolucionarias con altas probabilidades de llegar a producción en breve
En esencia, la idea de Hyundai se basa en una rueda (conjunto de llanta y neumático) que cuenta con una serie de pequeños resortes hidráulicos que, accionados de manera eléctrica y automatizada, se despliegan o se contraen para empujar o guardar unas láminas de metal que sobresalen de la goma ocasionalmente (cuando el conductor lo decida pulsando un botón), en sentido perpendicular al eje, a fin mejorar la adherencia de forma notoria sobre superficies deslizantes. En caso de no emplearse, estas placas quedan ocultas en el interior del caucho.
Esta patente, tan sencilla como original, permite aumentar la seguridad sin que sea necesario abandonar el vehículo o realizar un cambio de neumáticos estacional, algo muy habitual en algunas regiones del norte de Europa o en zonas montañosas de España. El fabricante de coches ha asegurado que esta revolución podría llegar al mercado más pronto que tarde, pues su implementación es relativamente fácil y económica, aunque no ha adelantado ningún precio (se halla en fase experimental).
¿Mejor que unos neumáticos de invierno?
Es evidente que un neumático que integra en su misma estructura una cadena para nieve es mejor que un equipo convencional y manual, siempre y cuando garantice un buen comportamiento cuando las “hojas” metálicas están retraídas. Sin embargo, los actuales neumáticos de invierno, con especificación M+S y 3PMSF, funcionan muy bien en condiciones de nieve. Si además se acompañan de un sistema de tracción integral, existen muchas garantías de adherencia. ¿Qué ventaja competitiva aporta entonces?
Por un lado, esta solución asegura una mayor estabilidad del vehículo sobre hielo o sobre nieve congelada (endurecida tras varios días) y no sólo sobre copos “frescos”, como si de un neumático de clavos se tratase, pero con la posibilidad de conducir sin ellos cuando la calzada no es resbaladiza. Por el otro, las propias láminas de aleación sirven como aviso de renovación de la goma cuando esta se desgasta, ya que quedan sensiblemente por encima de la cubierta.