Gordon Murray es uno de los diseñadores de coches más famosos y reputados de la historia presente del automóvil. Es un diseñador en el sentido más amplio de la palabra, un ingeniero capaz también de desarrollar chasis completos de vehículos. Si no sabéis quién es, os ponemos al día: fue uno de los principales artífices del McLaren F1, posiblemente el mejor superdeportivo jamás fabricado. Además, ha diseñado el chasis del nuevo TVR Griffith. Su último proyecto se llama Ox, y es una camioneta de bajo coste que tú mismo puedes montar en apenas 12 horas. IKEA no ha tenido nada que ver en su desarrollo.
Ox es una camioneta ligera, ideada con el apoyo de Shell y del Global Vehicle Trust, una organización no gubernamental dedicada a promover la llegada del automóvil a las zonas más deprimidas y menos desarrolladas del planeta. Esta camioneta ligera ha sido diseñada de tal manera que pueda ser ensamblada en destino por parte de un equipo de solo tres personas sin grandes cualificaciones, usando herramientas básicas. En apenas 12 horas pasará de estar desmontada en cajas a estar rodando por sí misma. Su packaging es extremadamente eficiente, buscando los menores costes de transporte a destino.
Seis unidades caben en un contenedor estándar de barco de 40 pies de longitud. Solo cabrían dos unidades ensambladas en el mismo espacio. Como podéis comprobar en las fotos que acompañan a este artículo, es un vehículo muy básico, con paneles prácticamente planos, con sus remaches y tornillería a la vista. La parte trasera del Ox – que significa buey en inglés, dicho sea de paso – está descubierta, pero puede taparse con una sencilla lona impermeable. El portón trasero de la caja de carga actúa como rampa de carga, y en ella caben hasta tres pallets europeos de tamaño estándar (0,8 x 1,2 metros).
En este espacio de carga de 7 metros cúbicos (7.000 litros) también cabrían ocho bidones de combustible de 166 litros o 13 personas, si se adapta al transporte de pasajeros – además de los tres pasajeros de la cabina, aislada completamente de los elementos. Unas capacidades impresionantes si tenemos en cuenta que mide sólo 4,22 metros de longitud. La mecánica de esta mula de carga es un motor diésel de cuatro cilindros procedente de una Ford Transit. Un turbodiésel de 2,2 litros y 100 CV de potencia y 310 Nm de par máximo, asociado a una caja de cambios manual de cinco relaciones.
La base de los asientos de la caja de carga puede usarse para superar obstáculos en el camino, permitiendo que la camioneta llegue a zonas en las que los servicios básicos son de difícil acceso. Sus neumáticos son todoterreno y sus bajos están protegidos de piedras y obstáculos. El primer prototipo será enviado a India este mismo año, y pronto podría decidirse su producción en masa para mercados emergentes. En palabras del propio Murray, ha sido uno de los proyectos más gratificantes de su carrera en la industria de la automoción.
Fuente: Carscoops
