Los superdeportivos de Pagani no son simples coches. Su creador, Horacio Pagani, afirma que son obras de arte rodantes, y no podríamos estar más de acuerdo con sus palabras. El Pagani Huayra robó nuestros corazones en 2012, aunque abandonara el espectacular sonido atmosférico de los V12 de Mercedes-AMG de los que presumía el Zonda. La última evolución del Pagani Huayra se apellida BC, en honor al difunto Benni Caiola, uno de los primeros clientes de la marca y amigo personal de Horacio. En 2019 llega el Pagani Huayra BC Roadster, el descapotable con el que otros superdeportivos tienen sueños húmedos.
Todo sobre el nuevo Pagani Huayra Roadster BC
El diseño de los Pagani siempre ha sido espectacular, y este Huayra BC Roadster no es una excepción. Si bien no difiere demasiado del aspecto de los Pagani Huayra Roadster, encontramos en su kit aerodinámico varias diferencias, motivadas por su posicionamiento aún más radical. El spoiler fijo o el difusor trasero – con detalles en colores rojo y negro, con elementos expuestos de fibra de carbono – son los que más nos llaman la atención. El enorme spoiler trasero es un elemento de aerodinámica activa y genera una carga aerodinámica de nada menos que 500 kilos a una velocidad de 280 km/h.
Sus llantas de 21″ están envueltas en neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R con las letras bien visibles, pintadas de color blanco – una moda que no es de mi gusto personal. No sabemos a qué se debe el número «20» que adorna su lateral, pero quizá es una referencia al 20 aniversario del lanzamiento del primer Pagani Zonda. El interior del Pagani Huayra BC Roadster sigue la habitual estela de Pagani, con una complejidad y atención por el detalle enfermiza. Seguimos enamorados de las superficies expuestas de fibra de carbono, del bien visible mecanismo selector del cambio o de los barrocos asientos, de intrincado pero escultural diseño.
El Pagani Huayra BC Roadster es un coche muy ligero, gracias a un monocasco construido en fibra de carbono, en combinación con elementos tan ligeros, exóticos y caros como el titanio. Este superdeportivo pesa 1.250 kilos, 30 kilos menos que un Pagani Huayra Roadster, del que está derivado. A nivel mecánico, emplea el mismo motor M158 de origen Mercedes-AMG, un V12 biturbo de 6,0 litros de cilindrada. Gracias a unos turbocompresores modificados, este descapotable tiene 802 CV – 47 CV más que la mecánica del Pagani Huayra BC. Su par motor de 1.050 Nm es capaz de parar la rotación de la tierra y está disponible ya a 2.000 rpm.
Sigue pasando su potencia al tren trasero, a través de una caja de cambios de siete relaciones, un cambio automático de un solo embrague – algo que ahorra peso con respecto a una caja de cambios de doble embrague o convertidor de par. Aunque la marca italiana no ha facilitado datos acerca de sus prestaciones, afirman que es capaz de producir picos de aceleración longitudinal de 2,2 G. Sólo se producirán 40 unidades para todo el mundo. Su precio de 3,1 millones de euros antes de impuestos lo deja sólamente al alcance de los petrolhead más adinerados del planeta, a los cuales envidiamos profundamente.