Hace apenas unos días se presentó el nuevo BMW Serie 7. El buque insignia de BMW vino acompañado también del BMW i7, su versión 100% eléctrica de la que también hemos dado buena cuenta. Esta berlina de representación no solo es el coche más grande o lujoso jamás lanzado por la marca. Es un coche con una carga tecnológica muy por encima de la de cualquier otro coche – solo un Mercedes Clase S está a su altura. Una de sus grandes novedades, y una primicia en el sector, es una pantalla de resolución 8K y 31,3 pulgadas destinada a los ocupantes de las plazas traseras.
Técnicamente, esta pantalla es más grande que muchas televisiones de hace no tantos años. Aunque tiene una diagonal de 31,3 pulgadas, hay que resaltar que su formato es de tipo ultrapanorámico. De hecho su relación de aspecto es de 32:9. Este detalle es relevante, ya que prácticamente no existen contenidos con esta relación de aspecto – no es un estándar, y por ello no se desarrollarán contenidos comerciales a medida. Cualquier serie o película tendrá bandas negras en sus laterales o será víctima de un zoom que posiblemente nos prive de parte del contenido.
BMW Serie 7
Hablando de series o películas, el visionado de vídeo es uno de los principales objetivos de este display, cuya resolución es nada menos que 8K. Una resolución por encima de cualquier contenido disponible en las principales plataformas de streaming, y de las propias capacidades del sistema: no será capaz de superar una resolución 4K. Para el streaming, la Theater Screen hace uso del sistema Amazon Fire TV. Esto permite visionar en ella vídeos de YouTube, Prime Video, Netflix o incluso ver los directos de Diariomotor en Twitch.
Una conexión 5G integrada alimenta de datos al sistema. La pantalla es táctil – es posible acceder a multitud de funciones del vehículo desde ella – y está motorizada: cuando no se usa se pliega y oculta en el techo del vehículo. Cuando se activa, un sonido creado por Hans Zimmler se reproduce en sus altavoces, se cierra el techo solar y todas las cortinillas del coche, y se atenúan las luces de las plazas traseras. Es una experiencia inmersiva, casi digna de un cine, especialmente durante la noche.
¿Tiene sentido tiene esta pantalla?
Vamos al quid de la cuestión. En primer lugar, es una pantalla destinada solo a los pasajeros de las plazas traseras, que gracias a la enorme batalla del coche, gozan de mas espacio que en la versión larga de la anterior generación del BMW Serie 7. Esta berlina está orientada al mercado estadounidense pero especialmente, al mercado chino, donde este atributo es vital entre los potenciales clientes del coche. Estos clientes quieren ser llevados, más que conducir el coche, y esta pantalla abre un nuevo mundo al infoentretenimiento trasero.
No solo estarán informados y entretenidos durante los atascos de una macrourbe o un largo viaje por carretera, si no que la pantalla tiene todo el sentido en un mundo cada vez más electrificado. Por mucha potencia de carga que tenga el BMW i7 o la versión enchufable del BMW Serie 7, tendrá que hacer paradas más largas que un simple repostaje de combustible para cargarse de «electrones». En estas paradas, un equipo de calidad cinematográfica se convierte en un gran aliado para amenizar la espera.
Es más, en un mundo donde acabaremos desplazándonos de forma habitual en coches 100% eléctricos, veremos muchos más sistemas como este en un futuro cercano. Su desembarco comienza en las gamas más altas como es lógico, pero como ha ocurrido con muchas innovaciones, estas gigantescas pantallas para las plazas traseras se irán democratizando con el tiempo.
Fotos del BMW i7 2022