El presidente del Gobierno de España Pedro Sánchez se ha reunido con los líderes de los fabricantes de coches de China Chery, SAIC Motor y Hunan para mediar en el asunto de los aranceles de Bruselas a China. Un viaje de cuatro días en el que también se ha reunido con su homólogo chino Xi Jinping y ofrece una postura conciliadora, sabedor de que China investiga varios productos europeos, entre ellos la exportación de carne porcina de España a China.
Pedro Sánchez trata de ser intermediario entre ambas partes después de que España apoyase los aranceles
España es también beneficiaria de la inversión de Chery, estableciéndose en la antigua fábrica de Nissan en Zona Franca (Barcelona) para ensamblar los Omoda y Jaecoo, además de la situación de Cupra con el Tavascan que se fabricará en suelo chino. Pese a ello, es preciso recordar que España se encuentra entre los países que sí votaron a favor de los aranceles a coches eléctricos procedentes de China pese a que distintos sectores del automóvil, así como países como Alemania, estaban en contra (Reuters).
Tanto Sánchez como Xi coinciden en su creencia de que España pueda ser un entorno donde las compañías procedentes de China puedan invertir y operar (Europa Press). Además de las ya presentes Omoda, Jaecoo, Lynk & Co, Polestar, BYD o MG, esta situación llega también en el momento que Dongfeng (con sus respectivas gamas, Voyah y MHero), Skywell y otras desembarcan en España, algunas de ellas ya planeando fábricas en Europa para producir coches eléctricos libres de estos aranceles.
«Tenemos que reconsiderar – todos nosotros, no sólo los estados miembros sino también la Comisión Europea – nuestra posición con respecto a este movimiento. No necesitamos otra guerra, una comercial en este caso. Creo que tenemos que construir puentes entre la Unión Europea y China y desde España lo que haremos será ser constructivos y buscar una solución, un compromiso, entre China y la Comisión Europea», declaró Sánchez (Automotive News Europe).
El crecimiento de España con respecto a la Unión Europea, su posición geográfica ‘estratégica’ como puente con África y Latinoamérica y el capital humano cualificado han sido las razones que ha esgrimido el presidente español para defender la presencia de inversiones de empresas chinas en España. Sánchez ha pedido diálogo honesto entre ambas partes, China y Unión Europea, para reconducir las tensiones provocadas por el asunto de los aranceles.