El precio del combustible ha estado -y está- alcanzando máximos históricos día tras día, provocando que el diésel y la gasolina se hayan equiparado. La situación ha provocado y demandado la intervención del Gobierno para frenar la subida del carburante como ya han empezado a hacer otros países. Así, Pedro Sánchez ha anunciado la medida con la que se pretende poner punto y final al alto precio del combustible, estableciendo entre el 1 de abril y el 30 de junio una bonificación máxima de 20 céntimos por litro, de los cuales 15 asumirá el Gobierno y 5 las petroleras. ¿El problema? Que las pequeñas y medianas gasolineras no pueden afrontarlo.
Y es que esta traba al plan del Gobierno se suma a la subida del diésel en 5 céntimos para evitar la bonificación por parte de 493 gasolineras. Sin lugar a dudas, escenarios no beneficiosos para paliar la situación del precio de la gasolina, pero así ha comunicado la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES) la situación en la que se encuentran las gasolineras menos pudientes.
Las gasolineras pequeñas y medianas no pueden afrontar su parte de bonificación para reducir el precio del carburante
Siendo más concretos, el Gobierno ha establecido la bonificación mínima de 20 céntimos por litro de carburante, ya sea para profesionales o particulares. Esta se aplica sobre gasolina, gasóleo A y B, GNC, GLP y AdBlue entre otros. No obstante, mientras algunas gasolineras como Repsol o BP han tomado cartas en el asunto aplicando descuentos de 10 céntimos por litro para profesionales y particulares, otras estaciones de servicio no pueden asumir la petición de Pedro Sánchez.
Según los cálculos del Ejecutivo, el presupuesto de la medida por parte del Gobierno será de 1.423 millones de euros. Sin embargo, y ante la confusión generado entre las pequeñas y medianas gasolineras que no pueden asumir la bonificación, desde la CEEES han exigido conocer todos los detalles del plan de descuento que entrará en vigor el próximo viernes 1 de abril.
La barahúnda por parte de este colectivo nace a raíz de que, en una primera instancia, esta medida iba estar destinada única y exclusivamente a los transportistas, pero la noticia por parte de Moncloa aclaró que sería de carácter global. De esta manera nace una importante inestabilidad por parte de las PYMES del sector, quienes aseguran a través de la CEEES que «la medida se quedará sin efectivo» si pretenden contar con las gasolineras más modestas.
Y es que no debemos olvidar que la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio ampara a 4.000 gasolineras de las algo más de 11.000 que hay en total en España, lo que implica que un 36% de las petroleras nacionales son PYMES.
