Stellantis ya cuenta en su gama de vehículos industriales con las furgonetas que muy probablemente anticipan el futuro del transporte ligero de mercancías (y también pesado) por carretera. Tanto Opel como Peugeot han presentado las Vivaro-e HYDROGEN y e-Expert Hydrogen, dos furgonetas gemelas que recurren a la pila de hidrógeno como fuente de energía y solución cero emisiones, una tecnología mucho más interesante que las versiones puramente eléctricas de las mismas.
La pila de hidrógeno es la solución más prometedora para el transporte por carretera
A partir del año 2040 en España sólo se podrán comercializar furgonetas (y también turismos y motocicletas) con cero emisiones de dióxido de carbono, por lo que estas deberán recurrir a una mecánica tradicional puramente eléctrica con una batería de relativa gran capacidad o a pilas de hidrógeno. Esas versiones eléctricas de estas furgonetas ya están disponibles en los concesionarios, las cuales tienen en el mejor de los casos una autonomía de 330 km según el ciclo WLTP recurriendo a una batería de 75 kWh que necesita 45 minutos para cargarla al 80 % de su capacidad usando un punto a 100 kW, que dicho sea de paso, brillan por su ausencia.
Así pues, dependiendo del tipo de trabajo a desempeñar podemos estar ante grandes limitaciones que resuelven las versiones de hidrógeno, siendo este el motivo por el que en un futuro, cuando la red de higrolineras aumente (pues a día de hoy es testimonial), se espera que esta sea la solución adoptada por el sector del transporte por carretera. En sentido, cada vez son más los proyectos planteados al respecto, como el último por parte de Iberdrola que recibirá 50 millones de euros de ayuda estatal para constuir una planta productora de hidrógeno verde en Guadalajara.
En concreto, y volviendo al tema central, las Vivaro-e HYDROGEN y Peugeot e-Expert Hydrogen están construidas sobre la misma base que se utilizan para las versiones con con propulsor de combustión interna y mecánica eléctricas, alojándose en este caso en el vano motor los diversos componentes de la electrónica de potencia, inversor, la pila de combustible y un motor eléctrico de 136 CV.
Dicho motor es alimentado por la electricidad que se produce en la pila de combustible haciendo reaccionar hidrógeno y oxígeno y produciendo como único residuo agua. Esa electricidad se acumula en una pequeña batería de iones de litio de 10,5 kWh situada bajo los asientos delanteros y que actúa como una especie de «volante de inercia». De esta forma la pila de combustible de 45 kW trabaja estacionariamente y el motor de 100 kW (136 CV) que mueve las ruedas puede solicitar una potencia pico para solventar ciertas situaciones, como un adelantamiento, sin mayor problema.
400 km de autonomía «ampliables» y tres minutos para repostar
Además, y a diferencia de otros vehículos con pila de hidrógeno del mercado, como el Toyota Mirai, esa batería de 10,5 kW es posible cargarla externamente, como si de un híbrido enchufable se tratase, proporcionando así un extra de 50 km de autonomía que se suman a los 400 km que se consiguen por medio de los tres depósitos de fibra de carbono situados bajo el piso, en el lugar en el que se localiza la batería de las variantes puramente eléctricas y en los que se almacena el hidrógeno a 700 bares. Con todo ello, las Vivaro y Expert «de hidrógeno» logran una autonomía muy superior a las citadas versiones eléctricas, además de un tiempo de repostaje de sólo tres minutos.
En un principio ambas furgonetas, producidas por Opel Special Vehicles (OSV) en Rüsselsheim, contarán con carrocerías de 4,95 y 5,30 metros de longitud, hasta 6,1 metros cúbicos de capacidad (la misma que las de las versiones diésel y 100 % eléctrica) y una carga útil de hasta 1.100 kg. No obstante, por el momento las primeras unidades se entregarán a flotas en Alemania y Francia a finales de año, desconociendo cuando será la fecha elegida para su comercialización al gran público.
