Después del vídeo que te traemos hoy, jamás volverás a ver a los coches eléctricos con los mismos ojos. El reinado del hipderpotivo eléctrico ha comenzado de manos del Pininfarina Battista, un eléctrico de 1.900 CV emparentado con el Rimac Nevera, que acaba de demostrar que las mareantes cifras de prestaciones prometidas en su presentación son realidad. No apto para estómagos sensibles, el Pininfarina Battista es el nuevo rey de la aceleración y será muy difícil que alguien le dispute ese título.
La producción en serie del Pininfarina Battista ya ha comenzado en la factoría de Cambiano (Italia), motivo por el cual la firma italiana ha realizado el debut oficial de su nuevo hiperdeportivo eléctrico en Dubai, y más concretamente en el circuito internacional Dubai Autodrome. Allí Pininfarina se llevó una unidad del Battista para demostrar que no iban de farol a la hora de hablar de las prestaciones de este coche, consiguiendo pulverizar nada menos que 3 récords de una sentada.
El primer récord conseguido ha sido el de aceleración, pues el Pininfarina Battista ha realizado el 0-100 Km/h en 1,86 segundos. En esa misma lanzada y con el acelerador pisado a fondo, el Battista ha obtenido su segundo récord al hacer el 0-200 Km/h en 4,75 segundos. Y para terminar esta remesa de registros, el tercer récord alcanzado por el Battista se ha producido en deceleración, consiguiendo una frenada de 100 a 0 Km/h en una distancia de solo 31 metros. Teniendo en cuenta estas marcas, el Pininfarina es el coche de producción en serie más rápido del mundo, aunque no el más veloz ya que esa marca sigue en manos del Bugatti Chiron Super Sport y sus 490 Km/h.
Dicho esto, tampoco tendremos que esperar demasiado para ver a un eléctrico de producción pelear por un récord de velocidad, pues el hermano mellizo del Battista, el Rimac Nevera, ya ha demostrado ser capaz de alcanzar los 412 Km/h.
Y como decíamos en un principio, será muy difícil que nadie mejore las marcas obtenidas por el Battista, pues la supremacía del eléctrico en aceleración y capacidad de tracción han quedado sobradamente demostradas. La escalada de potencia que vive el segmento de los deportivos ha visto cómo la irrupción del motor eléctrico ha supuesto dar el salto a cifras en el entorno de los 2.000 CV, estando acompañados de mareantes cifras de par motor (2.300 Nm) y un sofisticado esquema de tracción total que permite no ceder un milisegundo en aceleración, ni tampoco un milímetro en frenada.
