El logotipo y/o emblema de una marca es uno de sus bienes más preciados, sin embargo en el lanzamiento del los nuevos Jeep Wagoneer y Grand Wagoneer hemos visto como la firma de Jeep no aparece por ningún sitio, ni siquiera el eslogan «Trail Rated» tan habitual en otros modelos de la gama. Se trata de un movimiento arriesgado, pero a la vez muy estudiado y nada casual, que ha llamado la atención de toda la industria y fans de la marca. Pero esta decisión de eliminar la marca Jeep tiene un propósito, y hoy vamos a descubrir cuál es realmente.
La búsqueda de un posicionamiento más premium es la culpable de que no exista ni un solo logotipo de Jeep en los nuevos Wagoneer. Esta idea, como decíamos, no es casual ya que se trata de una maniobra realizada por la marca en pos de meterse en un nuevo segmento del mercado, el de los grandes SUV de lujo. En esta categoría Jeep tiene que vérselas con modelos como el Lincoln Navigator o el Cadillac Escalade, y ante la falta de una firma verdaramente premium en Stellantis para competir en el mercado de los grandes SUV de lujo, la decisión ha sido forzar a Jeep a realizar este movimiento.
En los últimos tiempos estamos viendo cómo cada vez más marcas pretenden reposicionar su gama (Ford-Mustang, Hyundai-Genesis, Citroën-DS, SEAT-CUPRA…), buscando todas ellas ese mayor margen de beneficio que solo se consigue vendiendo coches más caros asociados a una mejor imagen de marca. Reposicionar una marca generalista no es fácil, motivo por el cual encontramos estrategias donde se apuesta por una mejor calidad de construcción, mayores posibilidades de equipamiento y motores más prestacionales. Y pese a ello, los fracasos suelen ser bastante mayores a los éxitos en este tipo de estrategias, motivo por el cual la apuesta más lógica es crear una nueva gama, submarca o fabricante «independiente».
Por esta razón, la decisión de Jeep ha sido concebir los Wagoneer y Grand Wagoneer bajo una identidad de marca diferente, pues aunque salta a la vista que en diseño estamos ante modelos Jeep, sus insignias y planteamientos son bastante distintos. A nivel de diseño, los emblemas que podemos encontrar en exterior e interior son siempre Wagoneer, dando así peso a una denominación que pretende entenderse como una gama diferente, más lujosa y exclusiva. Además, Jeep ha decidido renunciar a una parte de su identidad al eliminar el concepto «Trail Rated» de los Wagoneer, pues pese a que están diseñados como todoterrenos de lujo, su aspiración no es la de destacar como los todoterrenos más lujosos, sino como los SUV más lujosos, que es el verdadero enfoque de sus principales rivales. Dicho lo cual, además de apuntar a coches como Navigator o Escalade, los Jeep Wagoneer apuntan incluso más lejos y pretenden convencer al mercado de que también pueden ser una alternativa válida para BMW X7, Mercedes GLS o Range Rover LWB.
¿Conseguirá Jeep tener éxito en esta apuesta por el mercado de lujo? Sólo el mercado tiene la respuesta.