Imaginamos que en el garaje de Walter Röhrl hay una nutrida selección de piezas de lo mejor de lo mejor del automovilismo, con deportivos modernos, clásicos, coches de competición, unidades únicas y con una gran historia, un garaje a la altura de la leyenda del rally que es. ¿La última incorporación a este garaje? Un espectacular Porsche 356 Speedster con un buen secreto bajo el capó.
El Porsche 356 de Röhrl cuenta con el motor de un 930 Turbo
El último coche de Walter Röhrl es un Porsche 356 bastante especial, una unidad bautizada como 3000 RR y que trae consigo una buena historia y una importante diferencia mecánica con el modelo original.
Y es que este Porsche 356 ha dicho adiós al bloque original de 4 cilindros para dar cobijo al 6 cilindros de 3 litros de cubicaje de todo un Porsche 911 930 Turbo de 1977 o lo que es lo mismo, una mecánica que desarrolla una potencia de 260 CV para un conjunto muy muy ligero.
Además de los 260 CV de su nuevo motor este Porsche 356 está ensanchado y tiene un nuevo paragolpes delantero
Ensanchado y acabado en un bonito color gris con el interior rojo, en una combinación de lo más elegante, este Porsche 356 cuenta con una historia que va más allá del trasplante mecánico que ha sufrido y es que este 356 perteneció a Viktor Grahser, un mecánico aeronáutico que murió inesperadamente antes de restaurará este 356.
Tras morir Rafael Diez, de Diez Classic, se quedó con los tres Porsche 356 de Viktor y terminó el proyecto que a Viktor no le había dado tiempo a culminar, reparando la carrocería, pintándolo y haciendo una conversión del volante, pasándolo de la derecha (originalmente era australiano) a la izquierda.
Diez le pidió a Röhrl que lo probara y lo terminó comprando, pasando a lucir ahora las 4 insignias a sus espaldas de las victorias de Röhrl en el Rally de Montecarlo.