Parece que, poco a poco, los pricipales fabricantes de todoterrenos del mundo empiezan a percatarse de la necesidad de crear un nuevo nicho de todoterrenos por debajo del que hay emplazado en Europa. Y es que, debido a la tendencia de aumento de precios dentro del sector del automóvil y la consecuente escalada en las características de los mismos como medio para justificar que cada vez son más caros, dejando de lado las pick-up, actualmente es imposible encontrar un todoterreno a estreno que no ronde los 80.000 euros de precio.
Sin embargo, esto parece que va a cambiar, o al menos que habrá alternativas más baratas por debajo de los Toyota Land Cruiser, Land Rover Defender o Ford Bronco. Es precisamente de un hermano menor del primero de los modelos mencionados del que acaban de trascender las primeras imágenes en las redes, adelantando las formas de un 4×4 de tamaño más compacto que el británico que conocemos, pero que puede llegar a mantener las misma capacidades todoterreno.

Land Rover Defender
La gama Defender se ampliará igual que las Range Rover y Discovery.
Imágenes del Land Rover Defender Octa






Se trata del ya denominado como Baby Defender, del que la revista Autocar acaba de publicar las primeras fotos espía, en las que se aprecia un 4×4 con el mismo lenguaje de diseño que el 4×4 británico, pero con formas más próximas a un todocamino que a un todoterreno.
El desarrollo de este modelo ha sido durante años objeto de rumores: nunca se había confirmado oficialmente y no ha sido hasta hace poco, tras las declaraciones de Adrian Mardell, CEO de JLR, cuando el llamado ‘baby Defender’ ha pasado a formar parte de la hoja de ruta oficial de la compañía. Según las previsiones, el modelo llegará al mercado en 2027, coincidiendo con el lanzamiento de las nuevas generaciones eléctricas del Range Rover Evoque, Velar y Land Rover Discovery Sport, con los que compartirá plataforma.
El modelo utilizará la nueva arquitectura EMA (Electrified Modular Architecture), una base diseñada específicamente para coches eléctricos de segmentos medios en los que actúan Jaguar y Land Rover, orientados a un uso más versátil y urbano. Aunque se espera que mantengan cierto nivel de capacidades off-road, por enfoque serán más cercano a un SUV con capacidades 4×4 (o sea, un todocamino) que al de un todoterreno extremo. Contará con arquitectura de 800 V de tensión nominal, lo que significa que debería ser capaz de asumir potencias de carga de hasta 350 kW, en este caso. Además, con baterías de mayor densidad energética y perfil más delgado, facilitará una mayor altura libre al suelo y una mejor distribución del espacio interior que otros coches similares con baterías. El Mercedes Clase G, por ejemplo, tal y como hemos podido comprobar al probarlo en el circuito Raidaventura de Ocaña, peca de una menor altura libre al suelo debido a la presencia de la batería en los bajos del coche.
En términos de diseño, y a tenor de lo mostrado por las imágenes espía, este baby Defender manetendrá la estética cuadrada y robusta del modelo grande, con proporciones que evocan claramente al Defender original. Sin embargo, será significativamente más compacto, según apunta la propia Autocar, medirá aproximadamente 4,6 metros de largo, 2 metros de ancho y menos de 1,8 metros de alto. Contará con pasos de rueda acentuados, paneles lisos para su carrocería y las habituales protecciones todoterreno, en línea con la estética 4×4 del Defender actual
Previsiblemente, esta versión será lo mismo que el Discovery Sport al Discovery normal.
La aparición de este modelo se enmarca dentro de la nueva estructura corporativa de JLR, que ahora agrupa sus productos bajo marcas diferenciadas: Defender, Range Rover, Discovery y Jaguar. En este contexto, Defender se consolida como una marca con identidad propia, aunque siempre debajo del paraguas formado por Land Rover.
Será el primer modelo completamente nuevo bajo la marca Defender de esta reorganización, y aunque no se han confirmado aún sus posibles versiones mecánicas más allá de su condición elétrica, no se deberían descartar más opciones, como que la gama incluya variantes híbridas o eléctricas de rango extendido (EREV) para ampliar su atractivo comercial. De hecho, si se quiere que el modelo sea un éxito de volumen, esa flexibilidad mecánica será una clave crítica.
Deberá tener unas capacidades todoterreno mínimo para poder portar la denominación «Defender».
El baby Defender no llegará solo, sino que está predestinado a formar parte de una categoría emergente de todoterrenos de tamaño compacto basados, o al menos que toman la imagen, de los 4×4 más consagrados del mundo. Mercedes ya trabaja en un Clase G compacto conocido informalmente como «Little G», mientras que Toyota prepara una reinterpretación más accesible del Land Cruiser que no está claro que vaya a llegar a Europa. En paralelo, existe la posiblidad de que Ford triga a Europa el Bronco Sport, una versión SUV y de tamaño reducido de su icónico todoterreno americano.
Todo ello, para acabar, responde a una tendencia clara en el sector: adaptar los iconos del mundo 4×4 a formatos más accesibles, sin perder la identidad que les ha hecho reconocibles durante décadas, a la vez que sigan siendo capaces y suficientemente solventes en situaciones todoterreno. En ese sentido, el baby Defender tiene el potencial de convertirse en un nuevo pilar para JLR dentro de un segmento que promete crecer en los próximos años, aunque teniendo en cuenta la tendencia y realidad del mercado, si llega sólo como eléctrico lo tendrá complicado.
Imágenes del Land Rover Defender Octa





