Lo que voy a expresar a continuación es una opinión personal, y no refleja la de Diariomotor. Creo que BMW ha perdido el norte en cuanto a diseño desde hace unos pocos años. Aunque productos como el BMW X5 o el BMW Serie 3 me parecen logrados y bonitos, BMW ha dado palos de ciego en coches como el extraño Serie 2 Gran Coupé, o sin ir más lejos, el BMW X7 y su gigantesca calandra – que también ha acabado en el morro del BMW Serie 7. Pero sin duda, si hay que hablar de calandras incorrectas, tenemos que hablar de los nuevos BMW M3 y BMW M4. Qué sorpresa, ¿verdad?
Decir que la opinión se ha polarizado en cuanto a las calandras de los nuevos BMW M3 y M4 – y por extensión, a la de todos los BMW Serie 4 – es ser políticamente correcto. Personalmente, no las veo como un guiño al pasado de la marca, las veo como una forma de llamar la atención en un mercado en el que el producto presentado es absolutamente evolucionario. Y en ese sentido, han tenido una función impecable: han hecho que se hable, y mucho, de los nuevos BMW M3 y M4. «Que hablen de mí, aunque sea mal, pero que hablen», como reza el dicho popular.
Entiendo que el diseño de un coche es cuestión de gustos, pero hay un detalle de estas calandras que desmonta el argumento estético de forma objetiva. En prácticamente todos los coches, entre los que se incluyen no pocos BMW actuales, la forma de los faros apunta o está a la misma altura del borde superior de la calandra. Este juego estético centra la mirada en la parrilla, punto focal del frontal de un vehículo. Para muestra, un botón:
Fijaos en dónde terminan los faros de este Audi A5:
Y los faros de este BMW X5 M:
Sin embargo, con los BMW M3 y M4, no ocurre eso. La calandra es más alta que las ópticas, provocando una señal de extrañeza e incomodidad en nuestro cerebro. Las jorobas del capó me parecen curiosas, pero la altura de la calandra es objetivamente excesiva en su parte superior.
A mayores, su longitud me parece excesiva y el resto de elementos de su diseño frontal producen una sensación recargada y agobiante. El preparador Prior Design ha decidido tomar cartas en el asunto, y está desarrollando kits que transformarán el frontal de los BMW M3 y M4.
Las alternativas que nos presentan se recogen sobre el vídeo situado sobre estas líneas. Y hay que reconocer que la mejora estética es abrumadora. La calandra vuelve a tener formas sensatas y elegantes. Aunque aún son recreaciones digitales, en función de la acogida planean desarrollar varias «caras» para estos BMW deportivos. O quizá BMW se marque un «Chevrolet», cambiando la polémica calandra de su recién lanzado Camaro para evitar un descalabro comercial del que aún hoy día no se han recuperado. El tiempo lo dirá.
Galería de fotos del BMW M4 2021
