Lo que parecía una propuesta lejana en el tiempo, hace unos días se ha convertido en una propuesta sólida que, además, tiene grandes visos de convertirse en realidad. Hablamos de la instauración de un peaje por uso para todas las autopistas y autovías de nuestro país, un nuevo impuesto que puede incluso llegar a extenderse también a las carreteras convencionales. ¿Cuáles son las razones de la Administración para proponer una medida tan polémica?
En las últimas jornadas hemos visto como el Gobierno ha comenzado a avanzar seriamente en la propuesta de transformar todas las autopistas y autovías del país en vías de peaje, un peaje que se pagaría en función de los kilómetros recorridos. Parece que el ejecutivo central ha trasladado la propuesta a la Unión Europea, una propuesta casi «necesaria» si España quiere acceder a un nuevo paquete de fondos europeos, más necesarios que nunca en el contexto de crisis económica en el que nos encontramos.
Se trata de una medida que ha levantado una agria polémica, enfrentando a aquellos que abogan por una movilidad más sostenible tanto a nivel medioambiental como a nivel económico con los que piensan que la mayoría de las autopistas y autovías actuales no deberían ser de pago teniendo en cuenta la cantidad de impuestos relacionados con el automóvil que se pagan ya en la actualidad. Para estos últimos tenemos malas noticias: puede que los peajes de las autopistas no se quedan allí y salten también a las carreteras convencionales.
Carreteras convencionales…¿también de peaje?
Las carreteras convencionales se utilizan cada día por millones de conductores que o bien no necesitan utilizar autopistas o, por otro lado, no quieren acudir a este tipo de vías, especialmente si éstas son de peaje. Las estadísticas, por otro lado, muestran que la mayoría de accidentes de circulación con víctimas mortales se producen en este tipo de carreteras.
Seguro que más de uno de vosotros, al enterarse de la propuesta de aplicación de peajes en toda las red de vías rápidas del país, lo ha pensado: «entonces, muchos conductores dejarán de utilizar las autopistas y pasarán a circular por carreteras convencionales para poder ahorrarse dinero en cada desplazamiento». Bien, pues no habéis sido los únicos que lo han pensado.
Y es que la Asociación Técnica de Carreteras (plataforma integrada por técnicos del Ministerio de Transportes, de las comunidades autónomas, ayuntamientos y empresas constructoras y concesionarias) ha propuesto una serie de medidas de aplicación urgente, que incluye también la instauración de peajes en las carreteras convencionales.
¿Por qué peajes en todas las carreteras?
Según los técnicos de la Administración, la imposición de peajes en vías convencionales es necesaria para evitar la «fuga» de conductores desde las vías rápidas, permitiendo así minimizar la desviación de tráfico hasta este tipo de carreteras, reduciendo el riesgo de crear un «efecto rebote» que terminase por aumentar los incidentes de circulación en estas vías.
Para los técnicos del Ministerio de Transportes, la aplicación de los peajes en las carreteras de nuestro país es un asunto de carácter «urgente», que debería ponerse en marcha cuanto antes, debiendo ser además un sistema «interoperable», es decir, compatible entre las diferentes Comunidades Autónomas independientemente de quién sea el titular de la vía por la que estemos circulando.
¿Estamos entonces avanzando hacia el fin de las carreteras gratuitas o, por el contrario, es ésta la mejor alternativa para contar con una red viaria adaptada a los tiempos que corren?
