Competir con un coche como el Porsche 911 no es nada fácil, pero en 2014 en Mercedes-AMG se preguntaron ¿Y por qué no? Comenzando así la historia del Mercedes-AMG GT. 9 años después, y habiéndose convertido en su mayor rival, Mercedes nos ha invitado a conocer en Granada y en absoluta primicia a la segunda generación del AMG GT. Ya lo hemos probado, conducido y analizado a fondo, y por ello vamos a intentar responder a dos preguntas: la primera; ¿es mejor que su antecesor?, y la segunda y más importante; ¿es mejor compra que el Porsche 911?
Si bien el GT nació en 2014 como el segundo proyecto independiente de AMG, para entender bien de dónde viene este deportivo, lo primero que debemos hacer es retroceder hasta 2009 para descubrir a su antecesor directo, un tal Mercedes SLS AMG que fue el encargado de plantar la semilla de lo que hoy ya se ha convertido en una estirpe de superdeportivos diseñados, desarrollados y fabricados de forma íntegra por AMG.
Mercedes-AMG GT 2024, el mejor AMG hasta la fecha
Tras el SLS llegó el primer Mercedes-AMG GT, un coche muy diferente en planteamiento, aunque todavía más ambicioso al apuntar directamente al Porsche 911 con la intención de convertirse en su mayor rival. Y lo cierto es que AMG acertó con el cambio de registro, pues junto a un diseño cargado de carácter, apostó por una gama repleta de personalidades que iban desde el perfil más Gran Turismo, hasta las versiones más radicales GTR y Black Series, esas que en realidad sólo se disfrutan al 100% en circuito.
Y ahora, ya en 2023, Mercedes-AMG consolida su apuesta por este segmento, manteniendo la denominación GT ya reconocida por el público, aunque renovando íntegramente el concepto, lo que nos deja ante un coche que es nuevo del primer al último tornillo. A la hora de crear el nuevo Mercedes-AMG GT, los diseñadores partieron de una hoja en blanco en forma de nueva plataforma específica creada ex profeso por AMG, sin embargo el objetivo durante todo este proceso de diseño estuvo fijado en mantener la estética de la primera generación, evolucionando su tamaño y también sus rasgos, pero manteniendo todo lo posible del diseño original en cuanto a proporciones e identidad.
El resultado habla por sí solo, percibiéndose ese trabajo de evolución visual, aunque dejando bastante claro el que estamos ante un coche diferente por fuera y por dentro. Tenemos rasgos de muchísimo carácter como la parrilla panamericana tamaño XXL, unas ópticas LED muy afiladas o el uso de abultados pasos de rueda. Pero ello no quita para que también tengamos una silueta muy limpia, con la cabina apoyada en el eje trasero y un largo capó delantero.
Y si echamos un vistazo a las cifras puras y duras, la evolución también queda patente, pues este Mercedes-AMG GT crece en casi todas las cotas, destacando los casi 18 cm ganados en longitud.
En el interior el salto es mayúsculo en aspectos clave como espacio, confort, calidad o equipamiento. Para empezar, este habitáculo está pensado para albergar tallas de bastante mayor altura y envergadura, sumando a ello la posibilidad de optar por una configuración de 2+2 asientos opcionalmente, y añadiendo un maletero de 321 litros que puede extenderse hasta los 675 litros abatiendo los respaldos traseros.
El salto en calidad de materiales y construcción es notable, descubriendo que Mercedes-AMG ha puesto especial cuidado hasta en el más mínimo detalle a la hora de confeccionar este nuevo GT. Lo mismo ocurre con el equipamiento disponible, disfrutando de la mejor experiencia de su clase en cuanto a infoentretenimiento gracias a un cuadro de instrumentos de 12,3″ y una pantalla central de 11,9″. Por contra, lo sobresaliente de la experiencia contrasta con la mejorable ergonomía, pues al apostar sobremanera por los controles táctiles, más temprano que tarde llegan las distracciones durante la conducción.
Un AMG GT casi perfecto a nivel técnico
Una vez nos ponemos a indagar bajo la carrocería y tapizados de este nuevo GT, lo que descubrimos es una apuesta por todo lo alto desde el punto de vista técnico. Mercedes-AMG no ha escatimado en recursos, poniendo sobre la mesa todo un arsenal de gadgets e ideas para dar vida a un coche que se mueve a medio camino entre los Gran Turismo y los superdeportivos.
Partiendo de una nueva plataforma diseñada de forma específica por AMG para los nuevos SL y GT, nos encontramos con una nueva evolución del motor 4.0 V8 Twin-Turbo disponible en versiones de 476 CV y 700 Nm (GT 55) y 585 y 800 Nm (GT 63). Este propulsor transmite toda su potencia por primera vez a las cuatro ruedas mediante un sistema de tracción total inteligente 4MATIC+ y una transmisión AMG MCT de 9 relaciones.
A ello añadimos el uso de un eje trasero direccional capaz de girar hasta 2,5º al contrario de las ruedas delanteras y a velocidades de hasta 100 Km/h para aumentar la agilidad, combinándose con una suspensión interconectada que permite una mejora sustancial en el comportamiento de este GT, al conseguir un ajuste de la compresión y el rebote mucho más preciso y personalizable que con cualquier otro sistema.
El resultado de todos estos ingredientes trabajando al unísono ya os adelantamos que es prometedor, camuflando bastante bien el sobrepeso de alrededor de 300 Kg adquirido por este nuevo GT. Pero si queréis ver en detalle cómo se las gasta este nuevo GT y escuchar su glorioso V8 en acción, os recomiendo ver la prueba a fondo que os hemos dejado unos párrafos más arriba.
En AMG van a por todas y no se conforman sólo con Porsche
Sin precio oficial por el momento, la nueva generación del Mercedes-AMG GT ya se puede reservar en España y en sólo unas semanas deberíamos conocer los precios exactos de las dos versiones con las que se podrá compra por el momento: 55 y 63. Teniendo en cuenta su posicionamiento en el mercado y los lazos que lo unen con el nuevo Mercedes-AMG SL, parece lógico pensar en que el AMG GT se moverá alrededor de los 200.000 euros, apuntando así directamente al Porsche 911, pero también a coches como el Maserati GranTurismo, el Aston Martin DB12 o el Ferrari Roma.
