En estos momentos, y por primera vez en la historia, si tienes pensado comprar una berlina firmada por Porsche tienes dos opciones muy parecidas, pero a la vez muy diferentes. Hablamos de los Porsche Panamera y Porsche Taycan, sin embargo mientras el Panamera representa una forma de entender el automóvil, el Taycan es una ventana al futuro en muchos aspectos. Y es precísamente por este motivo por lo que en nuestra prueba de hoy nos preguntamos: ¿Tiene sentido comprarse un Porsche Panamera existiendo ya el Taycan?
La berlina más deportiva… para los puristas
El Porsche Panamera nació con la máxima de ser un 911 de 4 puertas y 4 verdaderas plazas, y precísamente en su segunda generación es donde más y mejor defiende esa idea. Tanto es así que incluso para este primer rediseño de su segunda generación nos encontramos con un paquete de mejoras bastante escueto, pero en donde destaca la promesa por parte de Porsche de crear un coche más deportivo en prestaciones, pero también en sensaciones.
Porsche Panamera
Así, durante esta presentación del Panamera 2021 tuve la ocasión de probar las bersiones 4S E-Hybrid (560 CV), GTS (480 CV) y Turbo (630 CV). Y de entre todas ellas debo destacar las sensaciones encontradas en el GTS, un acabado que ha sido revisado para ganar en carácter y personalidad gracias a un V8 revisado para asemejarse al regusto de los motores atmosféricos, con una puesta a punto realmente conseguida para hacer ágil un coche de casi 5 metros y 2 toneladas y con un nivel de disfrute a la altura de lo que esperamos de un Porsche asociado a las siglas GT. Obviamente encontramos más prestaciones y contundencia en el Turbo S de 630 CV, pero el equilibrio conseguido en el GTS hacen que se haya convertido en el favorito de la gama.
Etiqueta CERO en 3 Panamera diferentes
Teniendo en cuenta que el futuro es sí o sí eléctrico y que ya a día de hoy el 70% de las ventas de Panamera son híbridas, la actualización de la berlina de Porsche se produce estrenando una nueva versión híbrida enchufable para que sean ya 3 las diferentes configuraciones con etiqueta cero emisiones. A los Panamera 4 E Hybrid de 462 CV y Panamera Turbo S E-Hybrid de 700 CV, se une ahora un Panamera 4S E-Hybrid de 560 CV como variante intermedia en precio y prestaciones, buscando así ofrecer una alternativa de bajas emisiones para aquellos que buscan más potencia sin tener que dar el salto a los ya muy serios 700 CV del tope de gama.
Todos los Panamera híbridos comparten el mismo esquema de propulsión eléctrica con motor eléctrico de 136 CV y batería de 17,9 kWh, encontrando una autonomía eléctrica de 56 Km en el Panamera 4 E-Hybrid, 53 Km en el Panamera 4S E-Hybrid y 50 Km en el Panamera Turbo S E-Hybrid. Además, con la llegada de esta actualización, Porsche también ha revisado la gestión energética de la batería para mejorar su eficiencia, especialmente durante la regeneración, y ha modificado el tacto del pedal de freno para asemejarlo al que ofrece un freno convencional (sin regeneración). Con ello nos encontramos una oferta que presume de ser la más completa de su categoría, encontrando además como el fabricante alemán ha conseguido que sus híbridos sigan ofreciendo un comportamiento muy deportivo a pesar de hándicaps como el obligado aumento de peso o la pérdida de protagonismo de sus motores V6 y V8 frente un más eficiente motor eléctrico.
El Porsche de los largos viajes, incluso con chófer
A sabiendas de que en las versiones híbridas enchufables disfrutaremos de la misma etiqueta cero emisiones que la que luce el Porsche Taycan, no podíamos pasar por alto que además el Panamera ha sido diseñado para ser el rey de los largos trayectos sin problemas de autonomía, confort o espacio. Sí, seguimos hablando del mismo Panamera que es capaz de brillar en circuito, pero ello no ha impedido a Porsche fabricar una berlina o familiar de gran confort en todas sus plazas, colocándose a la altura de sus rivales más lujosos como Audi A7 Sportback, BMW Serie 8 Gran Coupé o incluso Bentley FlyingSpur.
Tanto es así que si pensamos en el Panamera como coche familiar o vehículo para ser llevados por nuestro chófer, además de encontrarnos unas plazas traseras que nada tienen que envidiar a las delanteras, podemos ir un paso más allá adquiriendo la versión de batalla larga de la berlina denominada como Panamera Executive. Con ello, Porsche ha conseguido colarse en el competido segmento de las grandes berlinas de lujo destinadas a presumir de confort y tecnología por encima de todas las cosas. No estamos ante el summun de esta receta tal y como lo plantea un Mercedes Clase S, pero para aquellos que buscan una berlina de lujo diferente capaz de mantener un carácter realmente deportivo, solo tienen al Porsche Panamera y al Bentley Flying Spur como alternativas, siendo el Porsche una mejor elección si queremos ponernos al volante de forma habitual.
El Porsche familiar que no es un SUV
Y llegamos al final de esta prueba descubriendo la que es para mí la carrocería más bella del Porsche Panamera, su variante familiar Sport Turismo. Con la llegada del Panamera de segunda generación descubrimos por vez primera un familiar, un Shooting Brake de propia interpretación que ofrece a los que huyen de los SUV un coche algo más capaz en espacio que una berlina (515 litros frente a los 495 de la berlina), con un mejor acceso al maletero y con una estética con mucha personalidad. A día de hoy, si no quieres llevar a tu garaje un Macan o un Cayenne, el Panamera Sport Turismo es tu única alternativa en la gama Porsche, por lo menos hasta que haga acto de presencia en 2021-2022 el Taycan Cross Turismo con un planteamiento similar aunque 100% eléctrico y con una imagen crossover.
Indudablemente, el Panamera Sport Turismo está lejos de ser el familiar más útil de su categoría, ni siquiera pidiéndolo con la configuración de 4+1 asientos que permite Porsche. En este punto coches como el Audi RS6 o el Mercedes-AMG E63 Estate son el claro rival a batir, pero la estética es el punto más fuerte de esta carrocería, algo de lo que no todos sus rivales pueden presumir, manteniendo además intactas sus cualidades como coche deportivo que sí que es un punto diferenciador frente a otras opciones. Hablamos de una puesta a punto que es absoluta referencia y que se acompaña de una gama de propulsores mucho más completa con potencias desde los 330 hasta los 700 CV.