Nunca es bueno dar estas noticias, pero lo cierto es que vivimos un momento muy complicado para la industria del motor – convulso, más bien, sobre todo en Europa. Hace apenas unas horas quebró la empresa matriz de un proyecto que incluía a nada menos que un campeón mundial de Fórmula 1 y una estrella de la televisión británica.
Quiebra Radford Motors, la creadora del precioso Type 62-2
La empresa en cuestión es Radford Motors, que revivía el legado del carrocero británico Harold Radford, cuyo legado se extiende mucho tiempo atrás. Radford Motors había sido fundada por el mecánico de televisión Ant Anstead junto con el campeón mundial de Fórmula 1 de 2009 Jenson Button, así como Roger Behle. La empresa es propiedad de Finest Coachbuilding LLC, que ha empezado el proceso de bancarrota.
Según su CFO Dan Bednarski, «Radford Motors está atravesando una reestructuración del Capítulo 11 (el que hace referencia a la bancarrota según la ley norteamericana) que implementará cambios estratégicos para fortalecernos. Se espera que ocurra cierto cambio de propietarios, un paso importante en nuestra evolución. Estos cambios son parte de nuestra estrategia para allanar el camino para nuevos inversores«.
Radford se encargaba de convertir los Lotus Evora en su propio Type 62-2, un coche súper exclusivo que contaba además con una edición Track Edition que costaba un millón de dólares – unos 920.000 €, con un motor V6 con supercharger que podía llegar hasta los 710 CV. Todo ello en un coche ultraligero, de apenas 980 kg en vacío – de este Track Edition tan sólo se fabricaron 12 unidades (The Drive).
Como su nombre indica, el Type 62 toma la estética del Lotus 62 que compitió como Grupo 6 entre 1969 y 1974. Llevaba un motor 2.0 longitudinal en posición central y sería la base del Excel, el Elite y uno de los modelos más icónicos de la marca de Colin Chapman: el Esprit. Es por ello que tiene cierta relación a nivel estético con modelos de Lotus, así como con el Ford GT40 y otros prototipos contemporáneos.
Su modelo estaba inspirado en el Type 62 que, entre otros, originó el Esprit
No obstante, el precio de este coche – que, dicho sea de paso, es una preciosidad – no ha salvado a Radford de tener que entrar en proceso de bancarrota. Ya el pasado mes de julio Behle acusó a la gestión de la firma de mala gestión financiera, detallando una transacción en la que alegaba que Anstead y Bednarski se estaban quedando con fondos que eran para la empresa (Lawyer Monthly).
El propio Anstead ha afirmado que tanto él como Button permanecen comprometidos con Hadford, después de que la justicia considerara que las acusaciones de Behle no tenían pruebas suficientes (Motor Authority). De hecho, como parte de la compra de estos Track Edition se incluían cursos de conducción específicos con clases impartidas tanto por el propio Button como por otra gran estrella, Travis Pastrana.