Es posible que hayas leído en alguna web que Koenigsegg se ha imaginado un superdeportivo más asequible, llamado RAW by Koenigsegg. Lo cierto es que no es un proyecto oficial, es un estudio de diseño e ingeniería llevado a cabo como «trabajo de fin de grado» por parte de Esa Mustonen, estudiante de diseño. Mustonen ha trabajado como becario en Genesis y en RAW Design House, un estudio de diseño dirigido por Sasha Selipanov, jefe de diseño de Koenigsegg. Para su tesis de graduación en diseño industrial, ha tenido como tutor, a nada menos que a Christian von Koenigsegg.
El RAW by Koenigsegg sería el primer coche de una submarca «de acceso» a Koenigsegg, que competiría con fabricantes como Ferrari o Porsche. Su primer coche sería el que tenéis en vuestras pantallas, un superdeportivo de tres plazas y motor central, una reinterpretación de la esencia del Koenigsegg One:1. El One:1 tenía una relación peso potencia de 1 kg/CV, y este nuevo superdeportivo tendría la misma relación peso potencia, pero con un peso de solo 700 kilos. Es decir, sería un coche de 700 kilos y 700 CV, propulsado por el nuevo motor tricilíndrico de la marca.
Sí, el mismo Tiny Friendly Giant que propulsa al fantástico Koenigsegg Gemera. Este propulsor de tres cilindros y 2 litros está sobrealimentado por dos turbocompresores y su peculiaridad es que carece de árboles de levas, reemplazándolos por actuadores individuales que permiten variar el cruce y alzado de forma completamente variable en tiempo real. Este motor estaría situado tras el habitáculo, propulsando únicamente las ruedas traseras. No hay detalles acerca de la caja de cambios que este coche emplearía. Personalmente optaría por una Light-Speed Transmission.
Sus prestaciones serían de órdago, con un 0 a 100 km/h inferior a los tres segundos y una velocidad punta superior a los 350 km/h. El habitáculo tiene tres plazas, en una configuración idéntica a la de un McLaren F1. Mustonen afirma que su monocasco de fibra de carbono está inspirado en la Fórmula 1. Un volante similar al de los monoplazas y tres pantallas son todo lo que tiene su habitáculo, espartano y minimalista. Pero sin duda, lo más espectacular de este estudio de diseño es su aspecto, claramente futurista, lleno de aristas y con todo el carácter de la marca.
Su frontal parece muy anguloso, pero si nos fijamos en el parabrisas, es completamente aerodinámico, y el resto de su carrocería tiene líneas suaves. Líneas suaves, pero marcadas por aristas en el perfil lateral, frontal, y zaga. En la zaga parte de la mecánica está expuesta y un gigantesco difusor canaliza el flujo de aire, permitiendo que el coche prescinda de spoiler que «ensucien» su línea.
