Lo de recargar coches eléctricos en casa no es algo que vaya a estar al alcance de todos, más bien será cosa de una minoría, de ahí que la infraestructura de recarga pública tenga un papel fundamental en la electrificación del parque móvil español. Por ello, la apuesta por la creación de electrolineras como la que Porsche e Iberdrola acaban de inaugurar en Elche, o la que Endesa puso en marcha en Madrid hace unas semanas, es no solo un gran noticia, sino un ejemplo a seguir para que recargar un eléctrico deje de ser un problema para los que no tienen un Wallbox en casa.
En Diariomotor lo hemos dicho por activa y por pasiva, los grandes problemas del coche eléctrico son el alto precio de compra y la falta de infraestructura de recarga pública. Solucionados esos dos problemas, la transición al vehículo eléctrico será mucho más rápida y sencilla de lo que está siendo. Aunque la apuesta por la recarga doméstica, el uso de un Wallbox en nuestro aparcamiento, es crucial para conseguir el máximo ahorro y una gran independencia, la realidad de nuestro mercado demuestra que no todos los españoles cuentan con plaza de aparcamiento, o que aún teniéndola, no es posible la instalación de un punto de recarga por las limitaciones de la infraestructura.
Por lo tanto la recarga de esos coches eléctricos debe realizarse en puntos de recarga públicos, de ahí que sea tan importante que iniciativas como las de Porsche e Iberdrola sean replicadas. Este proyecto conjunto planea abrir en España un total de 35 estaciones de recarga, también conocidas como electrolineras, en donde encontraremos entre 6 y 8 puntos de recarga rápida. Más concretamente habrá disponibles 2 puntos de recarga de hasta 350 kW y el resto serán de potencias de 50 o 150 kW. Obviamente lo ideal es que todos estos puntos fueran de como mínimo 150 kW para reducir al máximo los tiempos de recarga, pero al menos es un paso.
Hemos de tener en cuenta que en España, la presencia de estaciones con más de dos o tres puntos de recarga rápida es anecdótica, lo que supone un serio hándicap a la hora de abordar un futuro en el que varios coches eléctricos necesitarán recargar al mismo tiempo y a la máxima potencia posible. Ionity sigue siendo la gran alternativa en este sentido, si bien su elevado precio hace que muchos usuarios eviten su uso. Por su parte, Tesla y la red Supercharger son referentes en este modelo de electrolineras, algo que está permitiendo a la compañía incluso abrir su red europea a otros coches eléctricos que no sean Tesla, convirtiéndose así en una red de recarga de referencia para muchos usuarios.
