Que la transición tecnológica de la industria automovilística, en términos de propulsión eléctrica, ya está empezando a tener efectos sobre las marcas más puristas y fieles al conductor tradicional no es novedad. Tras los primeros BEV de Mercedes-AMG, como el EQS 53, y de Audi Sport, como el RS e-tron GT, BMW M no quiso ser “menos” y desarrolló algunas versiones de modelos eléctricos existentes en la firma, como el i4 M50, un sedán de corte coupé con dos impulsores (4×4) y 544 CV de potencia.
Sin embargo, todo apunta a que la división de altas prestaciones del fabricante bávaro está pensando, si no manos a la obra, en su primer deportivo eléctrico original y podría ser la próxima generación de un coche legendario: el M3. Su llegada al mercado no estaría prevista hasta el año 2027, momento en el que empiece a implementarse a nivel productivo la plataforma Neue Klasse que los alemanes presentaron hace pocos meses. ¿Desaparecerá BMW Motorsport del modo en como lo conocemos?
BMW ya ha registrado el nombre de iM3
Lejos de ser un farol o una inocentada de mal gusto para los fanáticos de la compañía y en especial de su departamento más ambicioso con el rendimiento de sus vehículos, BMW ha registrado la denominación comercial iM3 en la Oficina de Patentes y Marcas de la Unión Europea y en la de la Propiedad Intelectual de Alemania, tal y como Ford lo hizo en Estados Unidos con una curiosa idea para sus 4×4. El término inscrito no deja lugar a muchas dudas: dentro de un tiempo, habrá un M3 eléctrico a la venta.
Probablemente, la berlina aspiracional que veamos en tres o cuatro años aún contará con una variante térmica, aunque probablemente hibridada (PHEV), pero esta noticia pone de relieve los planes de un futuro no muy lejano que también BMW ha decidido para una de sus insignias más conservadoras, sinónimo de pasión y sensaciones: la M. En cualquier caso, el anuncio del nuevo y probablemente repudiado iM3 tardará en hacerse oficial mientras acelera el corazón (si no lo rompe) de los «petrolhead».
Los germanos tendrán una versión eléctrica de todos sus modelos en 2025
Aunque el BMW iM3 no sea una realidad hasta 2027, ese coche podría contar con un diseño inspirado en el BMW Vision Neue Klasse que vimos en septiembre de 2023 a modo de prototipo. Con aquel “concept car”, los de Múnich pretendían adelantar las bases de su próxima era como constructor de automóviles 100% eléctricos, sin querer imaginar (en el fondo todos lo sabíamos) que ese también sería el destino de BMW M. Al menos, dentro de un casi lustro, las baterías se prevén mucho más ligeras.
Mientras los amantes de la gasolina y de la conducción pura comienzan a entonar el réquiem por la muerte de los BMW más rápidos con motor de combustión interna, la casa bávara se halla en un periodo de transformación por el cual mantendrá ICE y BEV a la vez en su cartera de productos. El punto álgido de esta coexistencia se alcanzará en 2025, momento en el que todos sus modelos tengan una versión eléctrica. La cuestión es si los M eléctricos lograrán las cualidades dinámicas de sus antecesores.