A día de hoy no es ninguna novedad la siguiente afirmación: las berlinas de toda la vida están en claro peligro de extinción. Sus ventas no dejan de disminuir y cada vez más fabricantes las eliminan de su catálogo de productos. Los SUV y los crossover se las han llevado por delante, y las pocas que quedan a la venta comienzan a ser prácticamente productos de nicho. Esta tendencia no es una novedad para Renault, pero los franceses han decidido apostar una vez más por los tres volúmenes, renovando el Renault Mégane Sedan. Eso sí, en las carreteras españolas no verás a esta berlina basada en el Renault Mégane.
El Renault Mégane Sedan es un coche en vías de extinción, que compite en un nicho de mercado en el que se ha quedado sin rivales. Ya no existe el Volkswagen Jetta, ni el Opel Astra Sedán. Solo quedan coches como el Mazda 3 Sedán o el Skoda Octavia, y ni siquiera tenemos un SEAT Toledo patrio como respuesta. Las berlinas compactas son desde hace años un coche para taxistas – no se tome esta afirmación como algo peyorativo, por favor – y han cedido toda su cuota de mercado a los SUV compactos. Con todo, siguen siendo coches tremendamente prácticos, además de muy elegantes.
Renault Mégane
El diseño del Renault Mégane Sedan es predecible, pero no resulta desproporcionado. Tras el lavado de cara del Mégane de cinco puertas y Sport Tourer familiar, el Sedan adopta el mismo frontal y mismas ópticas renovadas, ofreciendo una variada selección de llantas de hasta 18 pulgadas y una zaga en la que lo más destacable es el corto voladizo trasero. No es un compacto «con culo», es una berlina de proporciones cuidadas y aspecto armónico. Mide 4,63 metros de largo y presume de un maletero de 503 litros de volumen tras su portón trasero.
En su interior lo más relevante es común al Mégane que ya conocemos: puede montar una instrumentación digital de hasta 10,2 pulgadas, mientras que la pantalla central del sistema de infotainment crece hasta las 9,3 pulgadas. No hay sorpresas en lo tocante a infotainment o sistemas de seguridad activa, pero la gama de motores se racionaliza, obviando las versiones más potentes. Se compone de un 1.0 TCe de 115 CV y tres cilindros como motor de acceso, complementado por un 1.5 dCi de 115 CV y un 1.3 TCe de 140 CV como tope de gama.
Todos los motores se asocian de fábrica a un cambio manual de seis relaciones, mientras que el 1.3 TCe y el 1.5 dCi gozan, de forma opcional, de un cambio de doble embrague y siete relaciones. El Renault Mégane Sedan no se venderá en España. Se venderá solamente en 20 países, que son los siguientes: Arabia Saudí, Bulgaria, Croacia, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Estonia, Hungría, Irlanda, Israel, Letonia, Lituania, Marruecos, Polonia, Portugal, República Checa, Rumanía, Serbia, Eslovaquia, Túnez, Turquía y Ucrania.