Ser el propietario de un Mercedes 300 SL «alas de gaviota» no es algo sencillo. Se dejaron de producir hace más de 50 años, y las pocas unidades que se encuentran a la venta hoy día comandan precios que ya superan el millón de euros. Es el precio a pagar por uno de los clásicos europeos más cotizados de todos los tiempos, y posiblemente el Mercedes más bonito de todos los tiempos – con permiso de los 300 SLR de competición. Si tu presupuesto es más limitado, podrías optar por una buena réplica. Es el caso del coche que os presentamos hoy, que está a la venta por casi 200.000 euros.
Concretamente 198.800 euros son los que pide Car-Special.de por esta réplica del «alas de gaviota», basada en un Mercedes SLK 320 de primera generación. ¿Está justificado pagar por este coche lo que pagarías por todo un Mercedes-AMG GT C de 557 CV? Luego entraremos a valorar dicha afirmación. Por el momento, analicemos esta réplica. El primer detalle a tener en cuenta es que el hecho de estar basada en un Mercedes SLK no es una casualidad. El «alas de gaviota» y el Mercedes SLK comparten una distancia entre ejes de 2.400 mm, ideal para mantener a raya el resto de proporciones del coche.
Solo el ancho de vías, 10 cm mayor en el roadster, así como unos neumáticos más anchos de la cuenta, pueden darnos pistas de que no estamos ante el cotizado clásico de la marca alemana. Si no tenemos demasiado conocimiento del mundo de los coches, claro está. Los faros delanteros podrían darnos más pistas, al igual que la ausencia de paragolpes cromados, otra seña de identidad del modelo. Con todo, he de reconocer que a nivel visual, es una buena réplica. En cuanto al habitáculo, el fabricante no se ha molestado en alterarlo: es igual que cualquier Mercedes SLK de principios de siglo.
La consola central del coche, la instrumentación o el volante proceden directamente del SLK y no se han modificado. Sólo la tapicería de los asientos tiene un toque retro. Supongo que el encanto de estas réplicas es disfrutar de un coche de aspecto clásico con la comodidad y fiabilidad de un coche moderno. El motor 3.2 V6 de este Mercedes «300 SL» desarrolla 218 CV, una cifra tres CV superior a la del clásico. La potencia es transmitida al eje trasero mediante una caja de cambios automática de cinco relaciones y convertidor de par. No es un coche lento, pero tampoco es un «rompecuellos».
Toda la transformación ha sido homologada por el TÜV alemán, y en ella se ha invertido una suma importante de dinero. Ahora bien, ¿pagarías casi 200.000 euros por esta réplica? Personalmente, pagaría unos 70.000 euros por un Mercedes 280 SL «Pagoda», y el resto lo invertiría en un coche moderno, guardando un bonito colchón para mantener el clásico – que conservará ese tacto antiguo, esos olores y ese encanto.
Fuente: Road&Track
En Diariomotor:
