Este anuncio debe tomarse con claras dosis de escepticismo y una pizca de sal, pero como suele decir el refranero, «cuando el río suena, agua lleva». En una entrevista con Pierre Leclercq, jefe de diseño de Citroën, a la publicación británica Autocar, el directivo francés ha confirmado que la marca «no cerrará la puerta» a diseños neoretro. Leyendo entre líneas, Autocar afirma que un sucesor para el 2CV, el Citroën más icónico de la historia, estaría en camino. Vamos a ahondar un poco más en estas afirmaciones.
Renault 5
Recuperar un icono no es sencillo
Tradicionalmente, Citroën es una marca que siempre ha mirado adelante. Nunca ha sentido la tentación de crear productos de corte «neo-retro», más allá de algunos vehículos conceptuales y vehículos de muy bajo volumen. El propio Leclercq lo deja claro, pero sugiere que podría estar sucediendo un cambio de paradigma en las altas esferas de la marca:
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Fotos del Citroën 2CV
De hecho, el lavado de cara del Citroën Ami estrena ciertos guiños retro, como son sus curiosas ópticas o una imitación de las rejillas del 2CV original. Sin embargo, según Autocar, es el éxito del Renault 5 lo que habría empujado a Citroën a comenzar a desarrollar un 2CV moderno. El utilitario francés de Renault ha demostrado que es posible reeditar un icono del pasado sin abusar de lo retro. Es un claro homenaje a su pasado, pero al mismo tiempo, es un coche que se siente absolutamente actual y con mucha personalidad propia.
El diseño del Renault 5 es clave, pero también lo es su sistema de propulsión eléctrica. Sin él, hubiera sido imposible mantener sus proporciones. La transición energética al coche eléctrico también es una excelente «excusa» para recuperar coches revolucionarios. En su momento, el 2CV fue el coche que movilizó a la Francia de la posguerra. Era un coche absurdamente sencillo y simple, pero cargado de soluciones revolucionarias. Función sobre forma elevada a su máxima expresión, como te contamos en su momento en este extenso especial.
Todo apunta a que el 2CV moderno será un coche eléctrico, y sabiendo que el coste será absolutamente clave en su concepción, podría utilizar la plataforma Smart Car de Stellantis. No obstante, debería ser un producto de gran personalidad propia, además de aportar innovaciones al servicio de sus compradores, como lo hizo el 2CV originalmente. Es una tarea titánica, y puedo entender que a Citroën
. Pero el éxito comercial del Renault 5 es una fuerte motivación. Además, al Renault 5 ya le sigue un Renault 4, también eléctrico.
Fotos del Renault 5
