El software se ha convertido en una pieza fundamental del automóvil, motivo por el cual las marcas de coches han pasado de ser única y exclusivamente fabricantes de automóviles a convertirse también en desarrolladores de software. El grupo Volkswagen es una de las marcas que más ha apostado por esta nueva faceta, creando su propia división de software llamada Cariad, pero asumiendo enormes desafíos que ahora han obligado a Volkswagen a retrasar el lanzamiento de sus coches eléctricos más importantes, una nueva generación de eléctricos a baterías que pretende dar vida a los mejores Volkswagen, Audi, Bentley y Porsche jamás fabricados.
Bajo el desarrollo de los proyectos Trinity en Volkswagen y Artemis/Landjet en Audi, el grupo Volkswagen está sumido en la creación de toda una nueva generación de coches eléctricos dotados de la última tecnología en sistemas de propulsión, infoentretenimiento, conectividad y asistencias a la conducción. Dado que estos proyectos además darán vida a una base común que permitirá fabricar decenas de nuevos modelos eléctricos, el papel del software resulta vital para garantizar que esta base común no solo es modular y actualizable, sino fiable.
A estas alturas el software se ha convertido en una de los principales causas de averías y llamadas a revisión en los automóviles actuales, y teniendo en cuenta que este protagonismo del software irá a más, las marcas de coches están redoblando esfuerzos para pulir sus sistemas. Volkswagen decidió crear su propia división de software llamada Cariad precisamente para controlar todo el desarrollo, trabajando de forma más estrecha y personalizada en su creación, sin embargo los tiempos establecidos para tener listo este nuevo software no se están cumpliendo y Cariad acumula importantes retrasos.
Ante esta situación, el grupo Volkswagen no ha tenido más remedio que reforzar la capacidad de Cariad, pero al mismo tiempo posponer el lanzamiento de sus nuevos eléctricos de referencia. Hablamos de coches como el Audi Q6 e-tron, el sucesor eléctrico del Volkswagen Arteon, el primer Bentley eléctrico o el nuevo Porsche Macan 100% eléctrico. Este retraso supondrá pasar de un calendario de lanzamientos programado para 2024-2025 a una nueva hoja de ruta que habla de 2026-2027.
Dicho esto, Volkswagen también está trabajando en una revisión del software actual para poder moderar los retrasos de estos lanzamientos. Esta evolución de software actual permitiría añadir y mejorar las prestaciones actuales que ofrecen sus coches, pero no llegaría al nivel que pretende la nueva generación de software en la que están basados los proyectos Trinity y Artemis. Esto quiere decir que entre otras cosas, el nivel 4 de conducción autónoma no estaría disponible y que algunos de estos modelos por lo tanto no podrán ser el escaparate tecnológico que pretendían.
Fuente: AutoNews I | II
