Ya hemos visto antes cómo automóviles o motos icónicas son transformadas en potentes modelos eléctricos gracias a mentes ingeniosas. Y ese ha sido el caso de un Rolls-Royce Phantom II de 1929. Electrogenic lo ha convertido en un coche eléctrico sustituyendo su motor de seis cilindros en línea de 7,7 litros por un motor eléctrico e instalando una batería de 93 kWh con autonomía suficiente para 241 kilómetros por carga.
Un coche clásico transformado en una versión eléctrica
Este inesperado proyecto demuestra su capacidad para convertir coches clásicos en vehículos ecológicos de cero emisiones. En plena transición de la industria automovilística hacia un futuro eléctrico, Electrogenic ha encontrado una solución para mantener los coches antiguos en la carretera convirtiéndolos en vehículos eléctricos alimentados por baterías.
La empresa también descartó la caja de cambios manual original de cuatro velocidades no sincronizada. Electrogenic creó una transmisión directa de una sola velocidad a medida y realizó un escaneado en 3D del vehículo para determinar cómo configurar las celdas de la batería y encajarlas en el espacio disponible. Así que, mientras se eliminaban las partes aceitosas, la estructura del vehículo permaneció inalterada.
Sin alterar la estructura de este precioso coche, el resultado ha sido una genialidad
Electrogenic implicó algunas modificaciones en el sistema de frenado. Como la ubicación original del pedal y las palancas de freno era el espacio donde ahora se encuentra el paquete de baterías, se tuvo que diseñar un nuevo sistema de frenado recolocando las palancas y los cables. Se instaló un nuevo pedal para accionar los frenos y se colocó un sistema hidráulico entre el pedal y los actuadores de cable originales. Esta inusual conversión ha hecho su primera aparición pública en el Salon Privé, una exposición de cuatro días desde el 30 de agosto hasta el 2 de septiembre, en la que se presentaron vehículos de diversos fabricantes y que incluyó varios eventos para disfrute de los asistentes.
La última gota de gasolina y gasóleo es una cuestión de “cuándo” y no de “si”, y a menos que el combustible sintético gane tracción, la única solución es una conversión a los coches eléctricos. La iniciativa de Electrogenic presenta un futuro apasionante para la conservación de coches clásicos de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Es un testimonio de la innovación, y esperamos que otras empresas del sector del automóvil sigan este ejemplo. Electrogenic ofrece una solución para mantener los coches viejos en marcha convirtiendo los vehículos que queman combustibles fósiles en VE alimentados por baterías, lo que en el futuro podría resultar una alternativa viable a la compra de vehículos nuevos.
Más información: bmwblog.com
