ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Actualidad

2 MIN

El Royal Alloy GP 125 S es un nuevo scooter clásico que llega a España por menos de 3.600 euros

Lo retro está de moda y esta es una tendencia que no sólo se hace notar en motos de tipo cafe racer o scrambler sino que también llega a los scooter con nuevos envites a la hegemonía de Vespa. A alternativas como las propuestas por Lambretta o por Peugeot con el Peugeot Django, se le suma ahora la Royal Alloy GP 125 S, pero, ¿qué nos ofrece este nuevo scooter clásico?

El Royal Alloy GP 125 S emplea el mismo motor de 125cc del Apilia Scarabeo

Royal Alloy Gp 125 Dm 7

Siguiendo la perspectiva estética de las Vespa clásicas, el Royal Alloy GP 125 S es un scooter británico que confía en una mecánica con acento italiano y es que el propulsor de este scooter de 125 es heredado del Aprilia Scarabeo 125 LC.

Eso significa que este scooter de 125 está animado por un bloque de poco más de 124cc, monocilíndrico, con refrigeración líquida y una potencia de 14.3 CV, con un par de 10.5 Nm y una parte ciclo en la que destaca la suspensión de doble brazo delantera o los discos de 220 mm en ambos ejes.

El Royal Alloy GP 125 S tiene 14.3 CV, lo puedes conducir si tienes más de 3 años de carnet de coche

Royal Alloy Gp 125 Dm 2

Sobre la báscula arroja un peso de 130 kg, cuenta con un depósito de 11 litros y la altura del asiento se sitúa a 770 mm.

Esperamos poder probar pronto al Royal Alloy GP 125 S para contarte todo sobre su dinámica pero contar con el propulsor del Aprilia Scarabeo 125 LC es ya una buena señal de sus posibilidades.

El precio del Royal Alloy GP 125 S es de 3.595 euros

Royal Alloy Gp 125 Dm 1

¿Su precio? El Royal Alloy GP 125 S parte desde 3.595 euros y ya está a la venta. Recordemos que más allá de poder conducirlo con el carnet A1 pueden conducirlo todos aquellos que cuenten con tres años de antigüedad del carnet de coche.

Dame tu opinión sobre este artículo

Ni fu, ni fa
Me ha gustado
¡Muy bueno!

Mario Herraiz

Apasionado del motor, llevo sobre ruedas desde que a los 14 años me monté encima de una moto. Después llegaron los coches, la afición por la fotografía y más tarde el periodismo y con ello la posibilidad de convertir mi pasión en trabajo. Seguir leyendo...

Cargando...