Fue relativamente hace poco cuando se desveló que el Grupo Volkswagen abriría una gigafactoría de baterías en suelo español. Concretamente, el plan más ambicioso del consorcio alemán se materializará en Sagunto, Valencia, lo que se traduce en la primera fábrica de baterías en España tras una importante inversión. Pero es que ahora no solo esta futura fábrica nutrirá con baterías a sus actuales filiales, sino también a Scout, una de sus últimas adquisiciones.
Y es que hace unas pocas semanas, el grupo alemán anunciaba la compra de Scout, una emblemática marca que tuvo cabida en Estados Unidos entre los años 60 y los años 80. Siendo justos no es una compra de una marca al uso, sino que a raíz de la compra de otra marca, Traton, cuenta también con los derechos de uso de International Harvester y, por ende, de Scout.
Los modelos de Scout podrían recibir sus baterías de la fábrica española
Y es que mientras que en el siglo pasado el Scout era un modelo y no una marca, ahora el Grupo Volkswagen quiere jugar una nueva baza gracias al éxito del que gozó el 4×4 y crear una filial. Esto se traduce en todoterrenos y pick-up totalmente eléctricos que competirán de tú a tú con modelos como la Ford F-150, Rivian R1T y el GMC Hummer.
Pero, ¿qué tiene que ver en todo esto la futura fábrica de Sagunto? Lo cierto es que Volkswagen, aunque fabricará a los Scout en Estados Unidos, no tiene muy claro dónde exactamente, ni tampoco la procedencia de sus baterías. Es por ello que se disparan rápidamente las alarmas apuntando hacia España, donde la apertura de la gigafactoría coincidiría con el lanzamiento de Scout en América.
Ambos acontecimientos están previstos para el año 2026 y, aunque bien es cierto que los retoños de Scout tendrán sinergias con otros eléctricos del Volkswagen, el consorcio también ha comunicado que habrá modelos que partan completamente de cero, algo lógico teniendo en cuenta que serán 4×4 eléctricos y no SUV al uso.
Esto se traduce en que necesitarán componentes totalmente nuevos, tales como mecánicas, plataformas y, por supuesto, baterías, y no precisamente pequeñas. Aunque bien es cierto que el punto más lógico sería que Volkswagen utilizase su fábrica de Chattanooga, Tennessee, para crear baterías para sus eléctricos o realizar sinergias con otras marcas que ya produzcan en suelo americano baterías, la inauguración de la fábrica en Sagunto podría ser clave.
Y es que aunque los Scout se gesten de manera íntegra en Estados Unidos, las baterías podrían salir de la planta española teniendo en cuenta que esta también servirá para otras fábricas que el Grupo Volkswagen tiene repartidas por Europa. En total, serán 10.000 millones de euros los que se invertirán en Sagunto, creando más de 3.000 empleos y produciendo 40 GWh anuales.
Dichas cifras también resultarán claves en la concepción de los utilitarios eléctricos de Skoda, CUPRA y Volkswagen, los cuales serán producidos en España. No obstante, en caso de que Scout finalmente haga uso de Sagunto para recibir baterías, esto también podría ampliar la cartera de clientes de Volkswagen, ofreciendo apoyo a otras marcas que también fabriquen coches eléctricos y quieran beneficiarse de la localización y capacidad de la factoría que en 2026 abrirá sus puertas en Sagunto.
¿Qué esperamos de los modelos de Scout? ¿Llegarán a Europa?
De momento, poco o nada a desvelado Volkswagen acerca del futuro de Scout, más allá de compartir dos bocetos en los que se aprecian perfectamente un todoterreno y una pick-up con claros rasgos retro. Sus mecánicas serán 100% eléctricas, y estarán enfocados hacia un uso puro y duro off-road, requiriendo no solo de capacidad para salir fuera del asfalto, sino también mucha potencia y autonomía.
Esto se traduce en grandes y pesadas baterías, única solución que está aplicando todo fabricante que se atreve a crear 4×4 eléctricos. Pero, ¿llegarán a Europa los modelos de Scout con este planteamiento? De momento no está previsto que eso suceda, especialmente al percatarnos de que todos sus potenciales rivales se comercializan única y exclusivamente en Estados Unidos y que la táctica de Volkswagen pasa por recuperar un nombre que fue muy popular precisamente allí, en América.
