BMW, General Motors, Honda, Hyundai-KIA, Mercedes-Benz y Stellantis han anunciado una colaboración a través de la cual pretenden crear su propia red de cargadores para coches eléctricos con el objetivo de competir en igualdad de condiciones contra Tesla. Y es que todas esas empresas son conscientes del gran valor añadido que supone para un cliente de BEV que su marca le dé facilidades para recargar la batería de su vehículo durante sus viajes. Inicialmente, la alianza sólo operará en Norteamérica, pero no se descarta que sus frutos también lleguen a Europa.
Aunque Tesla haya abierto sus puntos de carga a los automóviles eléctricos de otras firmas (su competencia) y haya llegado a acuerdos para compartir su infraestructura con Ford, GM, Rivian y Volvo, parece que los consumidores siguen considerando como una inmensa ventaja que este fabricante cuente con su propia red, amplia, moderna, potente, sencilla, accesible y muy bien mantenida.
En vista del sorprendente crecimiento de las ventas de la corporación que lidera Elon Musk, igualmente empujado por una considerable rebaja de los precios o tarifas de sus modelos de base, seis de los mayores productores del mundo se han asociado para poner fin a la hegemonía comercial de Tesla, una vez ya parece que también ha terminado la tecnológica (pese al último informe de Reuters). ¿Conseguirá esta especie de coalición industrial mejorar su experiencia de uso?
Un proyecto tan apresurado como ambicioso: 30.000 cargadores ultrarrápidos en 2024
La idea es que, con la participación y la suma de los recursos de todo tipo de las empresas citadas, se pueda optimizar la experiencia de recarga para sus conductores o usuarios, quienes hoy en día confían en varios terceros para llevar a cabo este proceso. Alemanes, americanos, coreanos y japoneses tienen como meta construir un total de 30.000 puntos de recarga de alta potencia (y velocidad) entre Canadá, Estados Unidos y México antes de que el ejercicio de 2024 llegue a su término. Obviamente, todos serán accesibles para los clientes de las marcas que engloban.
Al margen del propósito principal, meramente estratégico, los responsables de BMW, General Motors, Honda, Hyundai-KIA, Mercedes-Benz y Stellantis desean que se trate de una infraestructura fiable y con un altísimo grado de disponibilidad. Los primeros terminales de este tipo estarán en funcionamiento el próximo verano y podrán ser empleados por automóviles con sistema de propulsión híbrido enchufable, así como mediante cualquier clase de conector: CCS o NACS.
Pionero en el sector, el acuerdo en cuestión queda pendiente de ciertos trámites que, tratándose de aquella región, tendrán pronta resolución. A partir de ahí, serán tanto los consumidores como las acciones defensivas de Tesla los factores que marcarán el rumbo o el dominio comercial de una industria en plena revolución. ¡Supondrá duplicar las estaciones que existen hoy en Estados Unidos!