En los últimos días se han producido importantes movimientos políticos en España que, necesariamente, condicionan algunas de las decisiones y de los asuntos referentes al diésel de los que tanto se ha hablado en los últimos meses. De manera que merece la pena que recapitulemos y reflexionemos acerca de la situación del diésel y dos de las medidas que tanta controversia han generado, la subida de los impuestos al gasóleo y su prohibición. ¿Qué sucederá en los próximos meses?
El «impuestazo» al diésel se «congela»
Tal y como veníamos adelantando en las últimas semanas, la dificultad para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado para 2019 comprometía la subida de impuestos al diésel, calificada por muchos como «impuestazo». Tras perder la votación en el Congreso y anunciar el adelanto electoral de las generales para el 28 de abril ya sabemos que no habrá subida, salvo que el Gobierno apure las últimas semanas de mandato e introduzca la subida mediante Real Decreto-Ley. En cualquier caso, atendiendo a la agenda electoral, y entendiendo que es una medida impopular, parece que las probabilidades de que se produzca la subida de impuestos al diésel, que pretende hacer que la diferencia con los impuestos de la gasolina se reduzca, son mínimas.
En cualquier caso estamos convencidos de que en los próximos años hablaremos de nuevo de este tema. La equiparación de los impuestos del diésel y la gasolina es un asunto que, en algún momento, ha de afrontarse, y por el cual la Unión Europea ha presionado a España.
La prohibición al diésel y la gasolina
Por otro lado tenemos otro de los asuntos más polémicos de los últimos meses, el que hace referencia al fin del motor de combustión interna, a la prohibición de la venta de coches diésel y gasolina en 2040 y su circulación en 2050. Recordemos que en noviembre se filtraba un borrador de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética en el que figuraban estas dos fechas, dando plazos a una transición hacia el coche eléctrico que planteaba otras muchas medidas, como la transformación del sector energético a favor de las renovables.
Esta medida fue, sin duda, una de las más controvertidas, generando la indignación del sector que aseguró no haber sido consultado. El año pasado escuchamos declaraciones de fuentes ministeriales que apuntaron, incluso, que «el diésel tiene los días contados». Más recientemente esos mensajes se han transformado en el «todavía tienen mucho que decir» que lanzó la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, en un evento en el que estaban presentes los representantes de la industria del automóvil.
Según publican algunos medios, que apuntan a fuentes del Gobierno, la legislatura de Pedro Sánchez podría dejarnos aún con la presentación de una Ley de Cambio Climático y Transición Energética en la que no figurarían los plazos dados, las fechas límite de 2040 y 2050, ni la prohibición de la venta de coches diésel y gasolina. De hecho, hay quien apunta que este proyecto de ley podría presentarse en el Consejo de Ministros de este viernes, que también planteará nuevas ayudas a la compra del coche eléctrico y otras medidas que aboguen por la transición que ha de vivir la movilidad y el sector energético en los próximos años.