El Skoda Citigo iV es un vehículo urbano, del segmento A, fabricado por la marca checa Skoda entre 2012 y 2023. La primera generación, que se actualizó en 2019 como un vehículo únicamente electrico. El Skoda Citigo iV se caracteriza por ofrecer una buena relación calidad-precio, y destaca por su polivalencia, equipamiento y autonomía, siendo uno de los coches más recomendables para desplazamientos urbanos. Se fabrica en la planta de Skoda en Bratislava, Eslovaquia.
Entre los coches urbanos que aspiran a rivalizar con el Skoda Citigo iV nos encontramos con otros urbanitas de su clase, entre los que destacan el Toyota Aygo, el FIAT 500e, el SEAT Mii electric o el Volkswagen e-up!. Es importante destacar, que el Skoda Citigo iV ha sido desarrollado en paralelo con estos dos últimos, compartiendo con ellos el grueso de componentes.
Diseño del Skoda Citigo iV
El Skoda Citigo iV no se puede considerar el vehículo con más estilo del mercado pero, sin duda, disfruta de unas líneas acordes con lo que se espera de un coche urbano pensado para ofrecer polivalencia y movilidad a bajo coste. No obstante, el Skoda Citigo iV ofrece un frontal en consonancia con el resto de modelos de la marca, con unos faros -con tecnología halógena- de gran tamaño y una pequeña parrilla carenada.
Los voladizos son muy cortos, mientras que la superficie acristalada es relativamente amplia, mejorando así la maniobrabilidad y la visibilidad, dos valores clave dentro del planteamiento que debe ofrecer un vehículo con un enfoque eminentemente urbano. Su trasera, cortada casi en vertical, permite además ajustar al máximo el espacio a la hora de aparcar y desaparcar un coche que mide 3.6 metros de largo.
Motor eléctrico del Skoda Citigo iV
El Skoda Citigo iV está disponible únicamente con una motorización 100% eléctrica, desechando las opciones mecánicas de gasolina que este pequeño urbano tuvo en su momento. El modelo checo equipa un motor eléctrico de 83 CV y 210 Nm alimentado por una batería de iones de litio instalada en el suelo del vehículo que ofrece una capacidad de 32.3 kWh, lo que le confiere una autonomía eléctrica de 265 km bajo la normativa WLTP. Es una autonomía muy cercana a la del Nissan Leaf, que tiene una autonomía de 270 km y a la del BMW i3, que tiene una autonomía de 260 km.
Como buen coche eléctrico, el Skoda Citigo iV no tiene una caja de cambios al uso, ofreciendo una relación fija hacia delante y otra para retroceder. La tracción es únicamente al eje delantero. En lo que a prestaciones se refiere registra un modesto 0 a 100 km/h de 12,5 segundos y una velocidad máxima, también modesta, de 130 km/h.
Interior del Skoda Citigo iV
El habitáculo del Skoda Citigo iV destaca por su espacio, siendo muy habitable para cuatro adultos siempre y cuando tengamos en cuenta que viajamos en uno de los coches más pequeños del mercado. Su salpicadero, de líneas simples y marcadas, apuesta por la robustez con materiales duros que, sin embargo, se presentan bien ajustados.
El equipamiento es escueto, aunque es cierto que no falta de nada, sobre todo si, una vez más, tenemos en cuenta el planteamiento de este coche. Así, con únicamente dos opciones de acabado (Ambition y Style), en cualquiera de ellos encontramos climatizador bizona, equipo de sonido Bluetooth, ordenador de abordo, sistema de asistencia de mantenimiento de carril o control electrónico de estabilidad. En la parte trasera, encontramos un maletero de 250 litros.
Dinámica del Skoda Citigo iV
En un coche con un planteamiento tan urbano como el Skoda Citigo iV, contar con una pisada tan estable y segura es muy agradable en todo momento. Así, con una gran agilidad en terreno urbano, el Citigo también es capaz de rodar con suavidad y tranquilidad en vías rápidas.
La autonomía homologada del Skoda Citigo iV es de 260 km en ciclo WLTP mixto, autonomía que puede ampliarse por encima de los 300 kilómetros en una utilización eminentemente urbana, donde el Citigo destaca por su eficiencia. Por otro lado, en carretera su autonomía puede descender hasta los 200 kilómetros si circulamos con frecuencia por encima de los 110 km/h. Puede recargarse en tomas de hasta 40 kW de potencia, aunque en un enchufe convencional de 2.3 kW de potencia tarda unas 12 horas en recargarse completamente.