Skoda tiene un objetivo de ventas muy ambicioso para su nuevo y pequeño crossover, para su SEAT Arona. Durante el Salón de Ginebra conocimos el prototipo Skoda Vision X, el que ilustra este artículo, y con él la certeza de que Skoda lanzará un pequeño crossover y que este llegará en 2019. Poco a poco vamos sabiendo más detalles de este modelo, como sus ambiciosas expectativas. ¿Cómo conseguirá este modelo convertirse en un éxito? ¿Qué cifras espera Skoda de él?
Las cifras del SEAT Arona de Skoda
Tal y como habría declarado Alain Favey, responsable de ventas y marketing de Skoda (ver artículo en Automotive News), el objetivo de la marca pasa por conseguir que su pequeño crossover se convierta en el segundo modelo más vendido de la gama SUV de Skoda, por delante del Skoda Kodiaq y solo superado por el Skoda Karoq. Si tenemos en cuenta las cifras de producción del Skoda Kodiaq, que comenzó a producirse en octubre de 2016, durante todo el año 2017, estaríamos hablando de que tanto Skoda Karoq, como el pequeño crossover, superarán las 124.002 unidades que alcanzó el Kodiaq el pasado año. En 2017 solo se habrían producido 15.445 unidades del Skoda Karoq, algo lógico si tenemos en cuenta que su producción arrancó en República Checa en julio, y en China en noviembre.
Skoda Kamiq
En 2017, en el fin de su producción, se vendieron cerca de 70.000 unidades del Skoda Yeti en todo el mundo. Del SEAT Arona, que comenzó a producirse en Martorell en julio de 2017, se produjeron 17.527 unidades. A finales de este año también comenzará a fabricarse en Navarra el nuevo Volkswagen T-Cross.
Pero el gran éxito de Skoda, y el modelo más importante, seguirá siendo el Skoda Octavia. La producción del Skoda Octavia en 2017 fue de 420.811 unidades. De cumplirse sus objetivos, Skoda conseguirá muy probablemente que el crecimiento interanual de su volumen de ventas en los próximos años se mantenga por encima del 10% – en 2017 fue del 13,7%, con cerca de 1.201.000 entregas.
Skoda quiere ser referente tecnológico de Volkswagen
Tan ambiciosas como sus cifras, el segundo plan de Skoda para su pequeño crossover. El Skoda Vision X se nos presentó con una dotación tecnológica realmente interesante, con un sistema híbrido (no enchufable) que combinaba tracción total con un motor eléctrico y sin conexión física con el motor de combustión, e incluso con un motor térmico que funcionase indistintamente con gasolina o gas natural.
Según Bernhard Maier, CEO de Skoda, la marca checa está luchando para que el Grupo Volkswagen autorice el desarrollo de un sistema híbrido inédito, que trabaja de una forma bien diferente a la de los sistemas híbridos enchufables que veremos en el Skoda Superb, o incluso en el SEAT León, pero también una tecnología que sería viable, y podría implementarse con sistemas que ya se han utilizado en el Grupo Volkswagen, y que son compatibles con la plataforma MQB-A0 de este modelo.
Más imágenes del Skoda Vision X: