Una nueva generación de uno de los productos más importantes de Skoda, el Skoda Octavia, está a punto de salir al mercado. Su presentación oficial está prevista para dentro de unos días, pero la marca checa ya ha comenzado a facilitar los primeros detalles de la cuarta generación del Skoda Octavia, un modelo llamado a coronarse como el Skoda más tecnológicamente avanzado de la historia.
Skoda Octavia
El Skoda Octavia es uno de los productos más relevantes de Skoda. La berlina media de la marca ha copado los primeros puestos de las listas de ventas de su segmento durante años, gracias a una serie de cualidades que lo hacen un producto muy atractivo: un estilo sobrio, una gran capacidad de carga, grandes dosis de espacio y, sobre todo, una relación calidad-precio excepcional.
Actualmente el Skoda Octavia se ve ya algo desfasado, algo lógico si tenemos en cuenta que el modelo que se vende actualmente está basado en el lanzado al mercado en 2013. Son casi siete años los que le contemplan, una cifra que, en un mercado como el automovilístico, no son para nada moco de pavo. Así pues, la nueva generación del Skoda Octavia está ya lista para presentarse, tal y como demuestran las «pistas» que la marca ha facilitado en los últimos días.
Un interior con la tecnología como protagonista
Si hace unos días conocíamos los primeros detalles de la carrocería del nuevo Skoda Octavia, ahora es el turno del interior, donde el cambio es absoluto. Las líneas rectas y sobrias del actual Skoda Octavia dejan paso a un salpicadero con trazos mucho más fluidos que, inmediatamente, nos recuerdan a los del Skoda Scala, el nuevo compacto de la marca.
El proceso de digitalización en el que está inmerso el Grupo Volkswagen se hace patente en el habitáculo del nuevo Skoda Octavia, que integra una nueva instrumentación digital y una pantalla central que puede superar las 10 pulgadas de tamaño, una cifra más que considerable. Además, integra controles físicos en la parte inferior, de forma similar a lo que encontramos en el recién estrenado Volkswagen Golf. El volante llama poderosamente la atención: pierde el brazo inferior para mostrar un diseño diferente a lo que nos tiene acostumbrados Skoda.
La ausencia de botones también ha sido uno de los pilares fundamentales en los que ha trabajado la marca. La consola central de formas clásicas deja paso a una consola central mucho más ligera, con un selector de marchas electrónico para la caja de cambios automática muy similar al del mencionado VW Golf, pareciéndose también a la del nuevo Porsche 911.
Apenas quedan unos días para que la nueva generación del Skoda Octavia se desvele, con un diseño más atractivo, un interior completamente renovado y una capacidad técnica muy superior al modelo actual. ¿El comienzo de un nuevo camino para Skoda?