En más de una ocasión se ha hablado de la vuelta de la marca neerlandesa de deportivos Spyker, la última vez hace poco más de un año gracias a una inyección de capital ruso, y según las últimas informaciones todo apunta a que 2022 será el año en el que regrese Spyker gracias a esa inverisón con la producción de tres modelos: el Spyker C8 Preliator, el Spyker D8 Peking-to-Paris SSUV y el Spyker B6 Venator.
Tal y como os contamos, los artífices de este resurgimiento son Michail Pessis, copropietario de varias empresas dedicadas a la modificación de coches y fabricación de elementos en fibra de carbono, y Boris Rotenberg, copropietario de BR Engineering y del equipo de competición SMP Racing.
Así pues, el actual CEO de la compañía, Victor Muller, seguirá al volante de la misma, manteniéndose también parte de las instalaciones y mano de obra cualificada en Holanda donde se llevará a cabo el proceso final de ensamblaje y se ubicarán los departamentos técnicos y de postventa. Sin embargo, la fabricación de las carrocería en fibra de carbono tendrá lugar en Rusia e ingeniería se dividirá entre el país de los Urales y Alemania con un departamento financiero y de control que operará desde Luxemburgo.
Como es de esperar, tanto Pessis como Rotenberg afirman estar motivados y trabajar para que el proyecto sea un éxito, mientras que Muller, quien resucitó la marca en 1999 y bajo cuyo mando se compró una manzana envenenada a General Motors llamada Saab, afirmar que este acuerdo da lugar a “una base más sólida que nunca” con un amplio acceso a recursos técnicos y financieros.
Malos tiempos para apostar por deportivos y motores de alta cilindrada
Sin embargo, dados los tiempos que corren con el fin del diésel y la gasolina a la vuelta de la esquina y restrictivas normativas en cuanto a emisiones amparadas por cuantiosas multas, llama la atención que la apuesta de Spyker para su regreso carezca de versiones electrificadas, al menos en una primera fase, puesto que las informaciones hasta ahora conocidas de esos tres modelos hablan de bloques V6 y V8 gasolina.
En primer lugar nos encontramos con el Spyker C8 Preliator, la tercera generación del deportivo icono de la marca que se presentó en el Salón de Ginebra de 2016 y que en principio esconderá bajo el capó un propulsor V8 de 525 CV de origen Audi. A él se unirá el Spyker B6 Venator, un deportivo de “acceso” con motor V6 de unos 375 CV, así como un SUV de casi cinco metros de longitud llamado Spyker D8 para competir con el Porsche Cayenne y compañía que equiparía el mismo propulsor del C8.
Fuente: EuropaPress
