En un momento donde la industria está pendiente del desarrollo de las baterías, ya sean de LFP (ferro-fosfato de litio), NMC (níquel, manganeso y cobalto) u otras composiciones, debido a lo cual China tiene una gran fuerza en el sector al contar con una gran cantidad de materias primas, otras alternativas están surgiendo. Y las vamos a ver en un coche que, a priori, no tendría nada que ver con el coche eléctrico. No hablamos del Fiat 500 o el Grande Panda, sino algo más…musculoso.
Pruebas de baterías de estado sólido para eléctricos de alto rendimiento
Stellantis firmó un acuerdo de inversión de 75 millones de dólares con la empresa Factorial allá por 2021 para acelerar el desarrollo de baterías para nuevos coches eléctricos. Ni LFP ni NMC, sino baterías de estado sólido, un tipo de baterías que, según el conglomerado francés, permitiría una densidad de energía específica superior a 390 Wh/kg, además de mejorar las prestaciones con respecto a las comunes baterías de litio gracias a la estructura FEST (Factorial Electrolyte System Technology) (Electrek).
Este tipo de baterías ofrecerían otras ventajas extra, como la de un menor peso (recordemos que es uno de los grandes males de los coches eléctricos, comprometiendo a todo el conjunto en lo que respecta a dinámica de conducción) y, según Stellantis, poder reducir el coste total con el paso del tiempo. Esta tecnología es conocida de hace años y, sin ir más lejos, Dongfeng ya ha dado a entender que utilizará baterías de estado sólido en futuros modelos que veamos en Europa.
La plataforma escogida para el desarrollo de estas baterías de estado sólido es la STLA Large de Stellantis, algo lógico teniendo en cuenta que lo habitual es hacer una tecnología a gran escala para, una vez afinada, que sea más barata de producir e instalarla en plataformas y segmentos del mercado inferiores. Además, esta batería encajaría para SUV eléctricos de gran tamaño, como los del segmento D…o para vehículos de altas prestaciones. Y aquí es donde viene la gran idea de Stellantis.
Ha escogido para esta iniciativa nada menos que el Dodge Charger Daytona, la versión eléctrica del clásico norteamericano del que tuvimos que despedirnos hace muy poco de sus versiones de combustión, así como del Challenger de 4 puertas. Un auténtico muscle car americano convertido a eléctrico, aunque tendrá su propio sonido gracias a Fratzonic como ya os mostramos tiempo atrás.
Una flota de pruebas que veremos para 2026
De momento se trata de una flota de demostración que Stellantis afirma que estarán rodando en las carreteras para el año 2026, un paso previo antes de que veamos estas baterías de estado sólido desarrollados por Factorial en vehículos de producción en serie. Las pruebas que tendrán lugar servirán para ver cómo se comportan estas baterías en conducciones de conducción reales, pues otro de sus atributos es que deberían reducir el riesgo de incendios como los que se han visto en tiempos recientes (Reuters).
La plataforma STLA Large es o será utilizada también por otras marcas como Jeep (caso del Wagoneer), Chrysler, Alfa Romeo (se prevé que sea la base de los próximos Stelvio y Giulia) o Maserati. El objetivo de estas baterías, que también podrían reducir los tiempos de recarga (otro de los grandes problemas de los eléctricos para largas distancias) es que puedan estar ya produciéndose en torno a 2029 (Automotive News Europe).