De cara al próximo 2025, las marcas han de alcanzar un objetivo de emisiones de CO2 establecido por la Unión Europea o, de lo contrario, se enfrentarán a multas que podrían ser potencialmente no de millones, sino de miles de millones. Esta situación aparentemente no afecta al ciudadano de a pie, pero sí. De hecho, podría afectar a cientos de personas directamente en España.
Stellantis necesita aumentar su cuota de ventas de eléctricos para 2025
Mientras que algunos fabricantes, como BMW o Mercedes-Benz, parecen ir camino de llegar a este objetivo a tiempo, en el caso de Stellantis es diferente (Automotive News Europe). Lo necesario para ello es conseguir una mayor cuota de ventas de coches eléctricos, que debería llegar al 20-25% pero este mes de agosto apenas se situaba en el 13% tras estancarse durante gran parte de este año. Si no aumentan las ventas de eléctricos, sólo hay otro camino de conseguir el objetivo.
Y este no es otro que reducir la producción de coches de combustión, lo cual podría ocurrir incluso el próximo 1 de noviembre según las palabras de Jean-Philippe Imperato, nuevo responsable de Stellantis en Europa tras haber sido CEO de Alfa Romeo y previamente de Peugeot (Automotive News Europe). En teoría estas cifras deberían mejorar con la llegada de Leapmotor, marca china englobada dentro de Stellantis en Europa que entraría dentro de los cálculos y se centra en coches eléctricos, con algunos modelos de autonomía extendida previsto para 2025 y 2026.
El objetivo es bajar de 106,6 g/km de CO2 en 2023 a 95 g/km – de no llegar, las multas serían de 95 € por exceso de gramo por vehículo. Según afirman analistas de Barclays y The Financial Times, las cifras se sitúan en unos 10.000 millones de euros mientras que el CEO de Renault Luca de Meo sitúa el impacto en unos 15.000 millones. En Italia, la producción del Fiat 500 eléctrico en Mirafiori está detenida hasta el 1 de noviembre, además de estar programada una suspensión de actividades varios días en noviembre en la planta donde se fabrica el Fiat Panda.
Si miramos los números de la planta de Stellantis en Zaragoza, de los 365.739 coches que se producen al año solo 44.000 son eléctricos, siendo la mayoría de combustión y/o híbridos (El Periódico de Aragón). De momento Imperato no ha confirmado ni que se vaya a producir esta limitación de producción de coches de combustión ni que provenga de ninguna fábrica en concreto. De hecho, hay un aspecto a favor.
Otra de las claves, los eléctricos de leasing y renting
Este objetivo de una mayor cuota de eléctricos se llevará a cabo según la media de coches eléctricos. Es decir, los concesionarios de España e Italia no deberían estar forzados a alcanzar una cuota del 20% dado que en España la cuota de mercado de eléctricos es del 5%, pero sí que se exigiría más a los concesionarios de Países Bajos, por ejemplo, donde la cuota es mayor (Portugal o Francia son también casos ejemplares en Europa).
Otra manera de aumentar la cuota de coches eléctricos sería ayudarles en situaciones de leasing y contratos de renting de larga duración. Muchos eléctricos están siendo devueltos tras haberse firmado un contrato de leasing entre 2021 y 2022, algo en lo que los fabricantes deben ayudar a sus intermediarios. Imperato afirma que «Se puede vender un eléctrico tres veces», refiriéndose a las otras dos veces como un coche de segunda mano.