Presente en el mercado desde finales de los setenta, su recorrido terminó a finales de los ochenta. En, más o menos, una década le dio tiempo a convertirse en Coche del Año en Europa un par de veces (1979 y 1981). Sí, hablamos del Talbot Horizon… aunque hoy no nos centraremos en el compacto, sino en una versión que sólo se vendió en el Norte del Viejo Continente: el Talbot Horizonzon.
El Talbot Horizon fue la respuesta que el Grupo Chrysler dio al Volkswagen Golf en 1977, tres años después de que el compacto alemán revolucionase el segmento. Se produjo en muchos países: desde Reino Unido hasta Estados Unidos, pasando por Francia y, también, por España. A nuestro país llegó en 1980 y usó la base del Simca 1.200 para ofrecer dos versiones: LS (59 CV) y GLS (83 CV).
El Talbot Horizon en Finlandia
Entre los países europeos elegidos por Chrysler para que el Talbot Horizon intentara ganar la partida al Volkswagrn Golf estaba Finlandia… donde llevó una ‘doble vida’ gracias a unas cuantas transformaciones. La más impresionante, probablemente, es la que lo convirtió en un vehículo de siete puertas que fue bautizado como ¡Talbot Horizonzon!
En Finlandia, la empresa local que se encargaba de ensamblar el Talbot Horizon se llamaba Valmet. O mejor dicho: Valmet-Saab. De hecho, su principal actividad era producir, en su fábrica ubicada en la ciudad costera de Uusikaupunki, algunos de los vehículos del fabricante sueco porque sus capacidades industriales eran limitadas.
Los extras de Valmet
El Talbot Horizon llegaba en forma de kit para que Valmet le diera forma… y no tardó en añadirle algunas características específicas como un tratamiento anticorrosión adaptado al duro clima escandinavo o sistemas eléctricos firmados por Saab. Algunas de estas modificaciones llevaron al compacto a otro nivel.
Valmet concibió algunas creaciones que se convirtieron en limusinas destinadas a ser utilizadas como coches lanzadera con los que trasladar a los viajeros (y a su equipaje) a los aeropuertos. Esa misma fórmula fue la que, en 1981, aplicó al Talbot Horizon. Lo estiró lo suficiente como para añadir una puerta más en cada lateral, aumentando, así, a siete (incluyendo el portón trasero) el número de accesos al habitáculo. El interior contaba, además, con tres filas de asientos y, al contrario de lo que suele ser habitual en muchas limusinas, las dos traseras no estaban enfrentadas.
Sin embargo, los planes de Valmet para el Talbot Horizonzon no tuvieron el éxito esperado y el prototipo se convirtió en un modelo único. El fabricante finlandés podría haber seguido dando su toque al Talbot Horizon si la historia del compacto hubiera sido más larga. No en vano, en 1984, los equipos de investigación y desarrollo estuvieron trabajando en un restyling con el que imaginaron un diseño coupé y más musculoso, dotado con llantas aerodinámicas, alerones y un spoiler al más puro espíritu del Grupo B. No les dio tiempo a materializarlo porque el Talbot Horizon escribió su punto final en 1986.
Imágenes: Valmet Automotive