Tesla lleva tiempo comercializando coches con un sistema de control de crucero muy avanzado, denominado Autopilot. También comercializa coches que, potencialmente, pueden ser autónomos, con toda la tecnología necesaria para circular sin conductor, cámaras, radares y sensores que permitirán que, una vez el software esté lo suficientemente desarrollado, y la ley lo permita, sean autónomos. Pero aún no lo son. Es por eso que un «conductor» de un Tesla ha sido «cazado» y sancionado por dejar que su coche fuera en modo Autopilot, sin nadie tras el volante, como demuestra un vídeo publicado por la policía de Hertfordshire estos días.
Un Tesla sin conductor por las carreteras británicas
La situación fue inmortalizada por un conductor de Reino Unido, que al adelantar a un Tesla se percató que no había nadie en el puesto del conductor y que solo iba un pasajero a bordo, en el puesto del acompañante. Al principio se especuló, incluso, que este «conductor» fuera dormido, mientras su Tesla circulaba en modo Autopilot y sin nadie tras el volante.
Tesla Model S
El responsable de los hechos habría sido sancionado con una multa de 1.800 libras, 100 horas de trabajo comunitario, y la suspensión del carné de conducir por 18 meses. Ver noticia en The Verge.
Autopilot de Tesla no es un sistema de conducción autónoma
La acción de este conductor no puede ser más irresponsable, si tenemos en cuenta que Autopilot de Tesla, como insistimos, es un sistema de control de velocidad de crucero muy avanzado, capaz de girar en las curvas, mantenerse en el carril y la trayectoria, la distancia de seguridad con otros coches, acelerando y frenando, e incluso automatizar adelantamientos. Pero, aún así, sigue siendo un sistema que exige un conductor al volante.
En los últimos años, por si no fuera poco, nos hemos encontrado con sucesos tan tristes como el fallecimiento de un conductor en un coche que, en apariencia, circularía en modo Autopilot. Por no hablar del caso del coche autónomo en pruebas de Uber, que contaba con un conductor supervisando la situación tras el volante, y una tecnología más sofisticada.
Por desgracia, y mientras algunos propietarios de coches con esta tecnología no entiendan que, como insiste en asegurar Tesla, esta tecnología no hace que un coche, de momento, sea autónomo, nos encontraremos con situaciones muy parecidas a esta, que ponen en peligro a los ocupantes del coche en cuestión, y a todos aquellos con los que se crucen por la carretera.