Sucedió hace algo más de dos meses, en abril. Toda nuestra atención se dirigía a un vídeo que había aparecido en las redes sociales chinas, y que también captó, como no podía ser menos, el interés de Tesla, puesto que el desafortunado protagonista no era otro que un Tesla Model S. En el vídeo, grabado por una cámara de seguridad de un garaje de Shanghai, se apreciaba cómo un Tesla explotaba y quedaba cubierto en llamas. Ante el revuelo generado y, sobre todo las dudas, Tesla no tardó en enviar a un equipo para investigar lo sucedido y desentrañar las causas del incendio.
Por qué explotó el Tesla de Shanghai
Elon Musk siempre ha lamentado la repercusión, según él exagerada, que tiene cualquier suceso que atañe a sus coches eléctricos o a la propia tecnología de Autopilot, defendiendo que el riesgo de incendio o explosión en un coche eléctrico es siempre inferior al de coches con motor de combustión interna. En cualquier caso, un suceso como este, que además ha tenido bastante repercusión, requería de una explicación.
Tesla Model S
Según ha publicado Tesla en las mismas redes sociales chinas en las que este vídeo se convirtió viral, la causa del incendio fue un defecto en un único módulo de baterías situado en la parte frontal del Tesla incendiado, un módulo de celdas 6752.T de Panasonic. Recordemos que Tesla ensambla sus propios módulos de baterías, empleando las celdas que les proporciona su proveedor Panasonic.
Vídeo de las cámaras de seguridad que registraron la explosión de un Tesla en Shanghai en abril.
¿Cómo ha solucionado el problema Tesla?
A pesar de que, según Tesla, se trata de un caso aislado, del defecto de un único módulo de baterías, la marca de Elon Musk no ha tardado en aplicar correcciones en sus sistemas que pretenden minimizar el riesgo de incendio. Tesla ya habría aplicado una actualización de su software – recordemos que las aplicaciones de Tesla se aplican automáticamente, y sin necesidad de que el conductor intervenga en ningún momento – que mejoraría la gestión térmica y el proceso de carga del Tesla Model S y el Tesla Model X.
En los últimos días algunos usuarios de Tesla habrían apreciado que la autonomía real de sus coches se había reducido. Desconocemos si ese caso tiene que ver con esta actualización. Pero lo que sí sabemos es que Tesla reconoció que esa merma en la autonomía real se había producido y que se debía a unos parches que habían aplicado, según la marca, para prolongar la vida útil de las baterías.