En un mundo conquistado por la información, en el que las compañías tecnológicas y las aplicaciones que utilizas en tu móvil bien podrían saber de ti, en muchos casos, más que tus familiares y tus amigos, la preocupación por la privacidad es cada vez mayor. O al menos debería serlo. ¿Pero te imaginas que el fabricante de tu coche te dijera que está utilizando vídeos que han sido grabados mediante las cámaras de tu propio coche? Lo que a priori puede parecer una locura, y un ataque flagrante a la privacidad, no lo es tanto. Y por supuesto Tesla ha pedido permiso a sus clientes, a los propietarios del Tesla Model S y el Tesla Model X, para comenzar a utilizar estos vídeos. ¿Pero por qué están tan interesados en las grabaciones que realizan las cámaras de sus coches?
Tesla tiene entre manos un plan muy ambicioso. Tan ambicioso como llegar los primeros a la meta del desarrollo del coche autónomo. Hoy en día Tesla ya comercializa automóviles que técnicamente, en lo que respecta a su hardware, estarían preparados para ser completamente autónomos. Eso quiere decir que el cliente que adquiera a día de hoy un Tesla Model S o Tesla Model X con Autopilot 2.0 sabe que, cuando el software esté preparado, y se den las condiciones legales necesarias, se despertará un día, su Tesla se habrá actualizado, y ya será capaz de circular prescindiendo por completo de un conductor.
Tesla Model X
¿Y por qué estamos convencidos de que Tesla será el primer fabricante – o al menos uno de los primeros – en comercializar un coche plenamente autónomo?
La gran ventaja competitiva de Tesla reside en que, desde hace años, sus clientes están participando irremediablemente en el desarrollo de sus coches autónomos. De ahí que Tesla haya acelerado la implantación de ayudas a la conducción y sistemas que automatizan tareas, si bien es cierto aún no podría hablarse de conducción autónoma, como el propio Autopilot. De ahí que Tesla haya estado trabajando con la información generada por su sistema Autopilot a lo largo de cientos de millones de kilómetros. Una información realmente importante, en tanto los desarrolladores serán capaces de analizar cómo ha actuado este sistema, que insistimos aún no es el de un coche autónomo, en millones de situaciones que algún día tendrá que resolver una máquina por sus propios medios.
Para conseguir aún más información acerca de este tipo de situaciones, el equipo de desarrollo de Autopilot de Tesla se encontró con que las grabaciones de vídeo de las cámaras de sus coches podían ser cruciales para instruir a la máquina sobre cómo lidiar con ellas.
Y es por eso que Tesla ha solicitado formalmente a sus clientes utilizar las grabaciones de las cámaras de sus coches.
Insistimos en que Tesla ha conseguido situarse en una posición realmente competitiva. En el mundo en que vivimos la información es poder. Y Tesla está acumulando información muy valiosa para el desarrollo del coche autónomo y muy probablemente más información que la que hayan podido recabar todos sus rivales, juntos, durante estos años. Ningún programa piloto, y ningún prototipo de coche autónomo en fase de pruebas, como el propio coche autónomo de Google, podría ser capaz de acumular tanta información al respecto de la conducción como la que está acumulando Tesla.
Obviamente, y como decíamos al principio, la preocupación al respecto de la privacidad no solo es razonable, sino también necesaria. Tesla asegura que toda la información que recaben será anónima, como leíamos estos días en Electrek.co. Eso quiere decir que los datos que recopilen acerca de la conducción de sus clientes y, en última instancia, las imágenes de vídeo, no estarán identificadas con ninguna persona, ni tampoco con el número de serie de ningún coche.
Tampoco sabemos qué cantidad de información está recopilando Tesla a estas alturas. Pero si alguno pensaba que la ventaja competitiva de Tesla residía en el aspecto moderno de sus coches, o en su tecnología eléctrica, ciertamente debería plantearse qué valor puede tener almacenar y procesar la información sobre la conducción de clientes, y sistemas como Autopilot, a lo largo de cientos de millones de kilómetros. Porque probablemente hayamos dado con la clave y la razón por la que muchos pensamos que Tesla ofrecerá un sistema de conducción autónoma completo mucho más avanzado, y mucho antes, que algunos de los fabricantes más poderosos e importantes del mundo.