Si lo pensamos bien, los sistemas de limpiaparabrisas apenas han cambiado en más de cien años. A comienzos del siglo pasado, cuando aún no se había popularizado el automóvil, surgieron diferentes patentes de sistemas de limpieza para el parabrisas. No obstante, generalmente recordamos a Mary Anderson como la inventora e impulsora de este sistema, que tras un viaje en tranvía por Nueva York, en el que su conductor constantemente tenía que parar para limpiar la suciedad, el agua, y el hielo, que cubrían el parabrisas, ideó un sistema basado en una palanca que facilitara su limpieza. Pero Tesla quiere ir más allá. Tesla quiere reinventar el limpiaparabrisas, ¡mediante un láser!
Tesla quiere reinventar el limpiaparabrisas con un láser
Si no fuera por la cantidad de sorpresas que nos ha dado Tesla en los últimos años, incluyendo la de su extraño Cybertruck, diríamos que esta es una de esas muchas patentes que finalmente no encuentran una aplicación práctica y viable.
Tesla ha registrado una patente de un sistema limpiaparabrisas para el coche que prescindiría de elementos móviles. Se acabó ese chirrido tan molesto cuando las escobillas del limpiaparabrisas están sucias o desgastadas. Tesla pretende limpiar la luneta de sus coches con un láser.
Ilustración de la patente de limpiaparabrisas láser registrada por Tesla.
El limpiaparabrisas láser de Tesla
Según esta invención admitida en el registro de patentes de los Estados Unidos, el sistema limpiaparabrisas de Tesla sería relativamente sencillo y constaría de tres elementos: un emisor láser, un sensor que detecta la suciedad, y la electrónica que supervisa estos dos elementos.
Su funcionamiento tampoco sería muy complejo, aunque suene a ciencia ficción. Por un lado, el sensor detecta la suciedad, o la humedad, en el parabrisas, empleando sistemas más precisos, pero no muy diferentes de los que ya se utilizan en los limpiaparabrisas automáticos modernos. Por el otro, se emitiría un haz de luz con una frecuencia e intensidad suficiente para eliminar la suciedad, según así lo estimen oportunos unos algoritmos, que no llegaría a penetrar el parabrisas del coche.
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